La medida deberá mantenerse mientras la autoridad sanitaria comprueba la salubridad del entorno y el control de cualquier vertido o similar que pueda estar generando los problemas detectados y se tomen las medidas oportunas
El brote ha afectado a 13 menores, algunos de los cuales ha precisado ingreso hospitalario, pero hay otros 6 casos más relacionados y con síntomas similares
La Dirección General de Salud Pública ha ordenado al Ayuntamiento de Ribamontán al Mar el cierre al uso público de la playa de Galizano por un posible brote de gastroenteritis por rotavirus, en tanto se pueda comprobar la salubridad del entorno y el control de cualquier situación que pueda estar generando los problemas detectados (vertido o similar) y se tomen las medidas oportunas.
De hecho, el Servicio de Pediatría del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, tras detectar un brote de gastroenteritis por rotavirus, se puso en contacto con la Sección de Vigilancia Epidemiológica de la Consejería de Salud para informar del incremento casos, con el antecedente común de haber estado en la playa de Galizano (Ribamontán al Mar) en las 24-48 horas anteriores al inicio de síntomas.
La Dirección General de Salud Pública mantiene, a su vez, comunicación con las distintas instituciones con competencias en este ámbito para llevar a cabo una actuación coordinada.
El brote notificado afecta a un número destacado de niños y parece tener su origen en la contaminación ambiental de dicha playa. Desde entonces, el Servicio de Vigilancia Epidemiológica está realizando investigación y seguimiento de la situación y, a día de hoy, ha identificado a 13 afectados, con confirmación analítica microbiológica y, al menos, otros 6 casos más relacionados, con síntomas similares.
Los afectados son todos niños de entre 1 y 8 años y, aunque la evolución de los casos está siendo adecuada, algunos han precisado ingreso hospitalario. Dos de ellos permanecen aún ingresados.
Todos los casos refieren haber estado en la mencionada playa entre los días 10 y 15 de agosto de 2025 y haberse bañado en una "poza" que se forma al bajar la marea, costumbre habitual en niños pequeños, tal y como refieren las familias y recoge la encuesta epidemiológica.
Ayer jueves, el área de inspección de Salud Ambiental del Servicio de Salud Pública constató in situ que la ría de La Canal, que desemboca en la playa, baja con mucha suciedad que termina en el arenal y, finalmente, en el mar, por lo que se han tomado diversas muestras para identificar posible contaminación en las aguas.