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- 26/01/2021
Dentro de las curiosidades de la corona británica se encuentra una maravillosa historia que además es una gran hazaña de la que puede jactarse la reina Isabel II, ya que, gracias a su amor y pasión por los animales, especialmente por los caballos, ha contribuidor de manera significativa para evitar la extinción de la raza Cleveland Bay originaria de Inglaterra cuya existencia se puso en peligro luego de la primera Guerra mundial, quedando muy pocos ejemplares en 1960 aproximadamente.
Lo que se conoce de la raza es que provienen del noreste de Inglaterra y el uso que se le daba en pleno auge de la raza era para cargar todo tipo de cargamento, de hecho ese era su principal oficio en la Primera Guerra Mundial y eran los favoritos de los comerciantes para poder transportar la mercancía que adquirían.
El origen de esta raza poco común proviene del cruce selectivo de caballos ingleses y de Pura Raza Española, el cruce perseguía poder conseguir una raza fuerte y elegante de equinos que sirvieran a los aristócratas para ser usados como animales de tiro para los carruajes, oficio en el que encajaban perfectamente porque eran fuertes veloces y agiles.
La reina quien se ha destacado siempre por un carácter bastante firme, ha demostrado su lado sensible identificándose con los caballos, unos animales bastante imponentes pero muy nobles.
Esto no es de sorprender, pues la reina siempre ha dejado ver su pasión por los caballos y las carreras de caballos gracias a que desde muy pequeña fue criada entre estos animales desarrollando así su amor por ellos.
Al conocer la reina que quedaban tan pocos ejemplares de esa raza y darse cuenta de lo importante que era preservarla, compro uno de estos caballos llamado Mulgrave Supreme y una vez dentro de la familia real fue enviado para su reproducción a los establos de la realeza encargados de la reproducción y crianza de caballos que dirigía la reina.
Gracias a la buena acción de la reina Isabel II, en los años siguientes comenzaron a aumentar significativamente en número estos caballos que habían sido de gran utilidad para el ejército y que no era justo que desaparecieran. Actualmente se usan para ser parte de eventos reales y ceremonias.
Dentro de sus funciones como reina, de Isabel II se sabe que en ocasiones se toma un tiempo para tener un encuentro con sus caballos y disfrutar de su hobby favorito y ver de cerca a sus más de 30 caballos de carrera.
Personas cercanas a la reina han dejado saber que esta amante de las carreras de caballos sigue muy de cerca todo lo que tiene que ver con el cuidado, crianza, reproducción y carreras que involucren a los caballos de su reino.
Su pasión por los caballos que demuestra la reina Isabel II no solo le permite pasar excelentes momentos haciendo lo que le gusta, además le genera importantes sumas de dinero al año para seguir incrementando su incalculable fortuna.
El record de carreras ganadas por los caballos de la reina la hacen uno de los poseedores de caballos de carrera más exitosos del mundo ubicándose en el puesto número 11.
Además por las cualidades del animal estos caballos son especialistas en las carreras de salto con pecho profundo y hombros poderosos.
Por lo visto la misma pasión que la acompaño de joven está presente hoy en día en esta mujer que sigue siendo una personalidad importante en el mundo de los caballos y que siempre se ha preocupado por brindarle calidad de vida y los cuidados que merecen, a cambio ellos le han permitido alimentar una hermosa pasión que heredo de su padre.
Los caballos Cleveland Bay hoy tienen una fuerte presencia en todo el mundo en comparación con lo que eran en número unas décadas atrás, más de 800 ejemplares se pueden encontrar en diferentes partes del planeta para hacer de esta extraña raza una gran sobreviviente con una gran historia que contar.
Es admirable que una reina con tantos asuntos importantes por atender concernientes a todo un país, se haya preocupado por la supervivencia de los equinos al borde de desaparecer y sin un futuro aparente, realidad que cambio gracias a su importante amistad con la reina.
Pero además de ser salvados por la propia reina, los caballos Cleveland Bay tienen un lugar especial dentro de la corona británica, actualmente son los caballos de enganche que se utilizan en la carroza real donde pasea su reina en los eventos especiales de la corona. Cleveland Bay se consideran como una de las razas más fuertes del mundo, no en vano la reina ha tenido un trato tan especial con ellos.
