Un buen libro con el que disfrutar del placer de leer algo diferente -clásico y divertido a la vez- para aquellos a quienes les gusta la historia y prefieren un ensayo o una biografía antes que una novela de ese género, para esas personas a los que les gusta conocer los hechos de primera mano, para los que les atraiga rastrear las similitudes de nuestro carácter y costumbres en personajes que nos precedieron y conformaron nuestra personalidad ciudadana y muchas características sociales que aún perduran. Nos referimos a la obra del historiador romano Cayo Suetonio Tranquilo, Los doce Césares, una relación de pequeñas biografías de los primeros emperadores romanos. A través de estas semblanzas, ligeras y no exentas de maledicencia, este celebrado autor romano pasa revista a las virtudes, vicios y defectos de los grandes emperadores. Asistimos a las intrigas y traiciones de todos contra todos para conseguir llegar a ser los amos del mundo. Comprobamos que solo con cambiar los nombres, vestimenta y poco más veríamos reflejadas las vidas de los poderosos de la actualidad en estos romanos de hace más de 2000 años.
Los retratos siguen un mismo esquema en los que se relata el origen de los personajes, méritos y circunstancias, los años en los que ejercieron el poder y su vida en la corte imperial, su personalidad y su muerte.
Su lectura es ágil y desenfadada pero eso no implica que no narre hechos ciertos y circunstancias constatadas de los años de esplendor del imperio romano, por lo que, además de disfrutar de una lectura entretenida, podemos aprender de manera amena la historia de Roma en el periodo que determinó su idiosincrasia y alcanzó su mayor apogeo, de Julio César -al que incluye aunque no llegó a ostentar la dignidad imperial- hasta Domiciano que cierra la dinastía Flavia. Cien años de poder sobre el mundo conocido, de ambición sin límites, venganzas y odios enquistados, asesinatos, lascivia y crueldad. Cien años cruciales en los que se forjaron los cimientos de la civilización que aún pervive aunque ya tambaleante. Son los años brillantes de las grandes obras públicas, las victorias militares, las leyes que constituyen la base y el soporte de las nuestras. En resumen, un libro que ha trascendido las fronteras del tiempo para narrarnos sucesos que no nos resultan del todo desconocidos.