Los veteranos del Club Deportivo Naval, acompañados por sus familias, disfrutaron este fin de semana de la tradicional comida de hermandad, que se viene realizando los últimos años. Así, se citaron cerca de cincuenta componentes, que cargados de ilusiones, compartieron pasado y presente y hablaron de sus proyectos para el futuro, encaminados a mantener viva la llama deportiva y que aquello que les unió, el balón, sea el motivo que les mantenga en forma y dentro de una familia que perdura en el tiempo.