Trucar el cuentakilómetros está claro que es algo que no debe hacerse, pero hasta ahora no está regulado por ley como una infracción grave. Es por esto que Ganvam (la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor) ha redactado una enmienda para el proyecto de Ley de Seguridad Vial que ya ha presentado solicitando que trucar el cuentakilómetros del vehículo se considere infracción grave.
La manipulación de estos cuentakilómetros, afirma Ganvam, es inaceptablemente frecuente entre ciertos operadores en el mercado, que trucan el cuentakilómetros con el objetivo de modificar el precio del vehículo y, de este modo, lucrarse de forma ilegal. ¿Por qué? Porque el precio del vehículo usado que está en venta se determina atendiendo tanto a la fecha en la que se produjo la primera matriculación como al kilometraje del vehículo.
Desde Ganvam solicitan que trucar el cuentakilómetros sea considerado infracción grave, ya que se trata de una manifestación de competencia desleal frente a la honestidad con la que sí que trabajan otros agentes y vendedores de vehículos usados. Afirman desde la organización, en definitiva, que se trata de un delito de estafa que puede ser penado con hasta seis años de prisión.
Por otro lado, denuncian las posibles consecuencias graves de esta práctica de trucar los cuentakilómetros para la seguridad vial, ya que cuando el usuario adquiere un vehículo usado cuenta con tener que realizar ciertas inspecciones periódicas al mismo en función de su antigüedad y su kilometraje. Si la empresa vendedora de dicho vehículo usado ha manipulado el cuentakilómetros el usuario y nuevo dueño puede no realizar las revisiones a su debido tiempo y esto puede acarrear problemas y situaciones que desemboquen en inseguridad en la circulación, tanto para él como para el resto de conductores o peatones.
El medio ambiente también se ve perjudicado por esta práctica, ya que por trucar el cuentakilómetros continúan en el mercado vehículos antiguos cuyas emisiones de gases nocivos son muy elevadas.
Por todos estos motivos, Ganvam solicita la aprobación de esta enmienda para que esta infracción, que ellos consideran grave, se incluya en la nueva Ley de Seguridad Vial. Buscan, de este modo, proteger al sector de venta de vehículos usados, proteger al consumidor, al medio ambiente y, sobre todo, garantizar una mayor seguridad en las carreteras.
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