Siempre que nieva surge en el Tres Mares un problema recurrente para el que no se aportan soluciones definitivas por parte del Servicio Cántabro de Salud. Desde la inauguración del demandado hospital reinosano en marzo de 2010, todos los años se han producido incidencias y contratiempos en las instalaciones a causa de la nieve y del diseño de una cubierta plana nada acorde para el clima de la comarca campurriana.
El fuerte temporal de finales de enero y principios de febrero ha traído consigo filtraciones de agua en el tejado que han provocado el pasado viernes el desalojo de varios pacientes de sus habitaciones (de la 6 a la 13 concretamente; prácticamente un tercio de las que hay en el hospital), y además esta semana se han tenido que cancelar entre el martes y jueves casi 50 operaciones de cirugía y oftalmología, explica María José Barrio, Delegada Comarcal de CC.OO. en Campoo y miembro del Comité de Empresa del SCS.
Y es que según la delegada sindical, "las goteras aparecen cada invierno" en el techo del hospital con el deshielo de la nieve acumulada que se filtra por las paredes, y asegura que "a los ocho meses de su puesta en marcha ya se observaban deficiencias que fueron comunicadas al Servicio Cántabro de Salud".
A esta situación hay que añadir que durante esta época del año la planta está al máximo de ocupación, tanto para los pacientes de medicina interna (a los que hay destinados 12 habitaciones dobles), como en las otras siete habitaciones dobles, para otro tipo de asistencia sanitaria e intervenciones quirúrgicas.
Unas inoportunas goteras que han provocado el traslado de varias personas de las habitaciones afectadas a otras, "producido en horario nocturno, con los contratiempos que conlleva, ya que por la noche prima el descanso del paciente", precisó Barrio.
Asimismo, hay que añadir el trastorno provocado a ese medio centenar de personas que iban a ser operadas este martes y jueves, cuyas intervenciones han tenido que ser aplazadas por no disponer de un quirófano para realizarles la cirugía menor ambulatoria que estaba programada. Además, la trabajadora del centro apuntó que las operaciones programadas para la próxima semana "están aún en el aire" al no saber si dispondrán para esas fechas de las habitaciones.
No solo están en mal estado las habitaciones, la delegada sindical añade que también hay filtraciones de agua en el vestíbulo de entrada y en los pasillos de circulación del personal sanitario de la zona de laboratorios. "Los trabajadores de mantenimiento nos han comunicado en varias ocasiones la dificultad para mantener una temperatura constante a través del sistema de climatización, y por si fuera poco, persisten los problemas con las bajantes y desagües, que no deben tener la inclinación suficiente y generan problemas de rebosamientos y olores".
Desde Comisiones Obreras también lamentan el estado exterior del hospital en estos días y señalan que "la Dirección de Sierrallana tampoco se ha encargado de la limpieza de la nieve del aparcamiento del hospital, y ha tenido que ser el Ayuntamiento de Reinosa quien lo ha limpiado el sábado 14 de febrero, cuando no era su competencia".
Una serie de problemas surgidos a raíz de la copiosa nevada y cuya respuesta por parte del SCS "ha sido nula". Y es que desde el punto de vista de la sindicalista "la Dirección de Sierrallana hace caso omiso de los problemas de infraestructura de este hospital", pues "tenemos numerosos registros del sindicato advirtiendo de las deficiencias, y los trabajadores de mantenimiento, además de hacer durante estos días lo que pueden retirando la nieve de la cubierta, han emitido informes que reflejan los mismos problemas, y no han hecho caso ni al sindicato ni al propio servicio de mantenimiento".
Para concluir su crítica a la "inacción" del SCS, Barrio subrayó que la actuación del año pasado con la reparación de goteras y posterior pintado de habitaciones "fue un paño para salvar los muebles en un momento puntual y darle un lavado de cara con un nuevo parche, pero es necesaria una inversión para solucionarlo de una vez o seguiremos con este problema año tras año", subrayó.
Por otra parte, la empresa subcontratada para el mantenimiento del hospital ha contratado a su vez a una empresa, ubicada en Reinosa, para que sus operarios retiren desde ayer la nieve que aún está acumulada en la cubierta del Tres Mares, según ha podido saber Vive Campoo en base a una conversación mantenida con la segunda empresa.
Un goteo de problemas en el tiempo
La Delegada Comarcal de CC.OO. en Campoo recordó que las filtraciones de agua al interior del edificio son "un problema recurrente", que surgió "en menos de un año" de la puesta en marcha del hospital, pero que se agudizó en 2012, cuando las nevadas fueron más abundantes que en los dos años anteriores.
"Desde el principio denunciamos públicamente la situación con el fin de acelerar la actuación del SCS, a través de Sierrallana (centro del que depende el Hospital Tres Mares), puesto que la obra era privada, y se debía responsabilizar de ella la empresa que la ejecutó porque había una garantía de tres años", explica Barrio.
Pero en 2013, "en vista que tanto la Dirección de Gestión como la Dirección Médica de Sierrallana no atendía nuestras demandas recurrimos a los medios de comunicación para mostrar el lamentable estado de los inmuebles -y prosigue-; en ese momento reaccionaron y se pusieron en contacto con la empresa que había construido el hospital, pero el plazo de garantía por parte de la empresa había vencido en marzo de 2013, aunque nos consta que para las cubiertas la ley contempla que es de diez años".
"Nosotros instamos al Servicio Cántabro de Salud para que se haga cargo del arreglo o bien que se dirija a la empresa que ejecutó la obra, pero esta situación no debe prolongarse más años", concluyó.
