Hace unos años paseando junto al Ebro por Valderredible me quedé fascinado por el arte de la pesca a mosca. La tranquilidad del atardecer en los ríos con las hojas de los chopos cubriendo el suelo y el sonido del agua... en fin en esas andaba cuando de repente observé algo que se movía entre las piedras de la corriente, era negro y buceaba ¿pero qué era eso?
Me acerqué más para verlo de cerca y el pescador que también se percató me dijo; "eso es una torda marina". Ante el follón montado el bulto negro salió del agua ¡¡¡volando!!! Eso ya me despertó por completo el interés en aquel pájaro.
Pasarían algunos años para que prismáticos en mano pudiese verlo bien. Guía en mano identifiqué aquel ave como mirlo acuático (Cinclus cinclus) y desde entonces no me deja de sorprender.
Este paseriforme es residente en nuestra comarca y fácilmente identificable por el observador, de color pardo-negruzco en su parte superior destaca sobre todo su babero blanco en el pecho. Esto sumado a su inquieto movimiento por las corrientes de agua, en las que se sumerge y bucea en busca de insectos para alimentarse, le hace inconfundible. Muchas veces se ha culpado a estas aves de comerse los alevines de trucha lo que es falso ya que su dieta es exclusivamente insectívora.
Puede permanecer sumergido hasta 30 segundos en busca de sus presas aunque lo normal es que cada inmersión no dure más de 5 segundos. El buceo se ve favorecido por su plumaje denso y una membrana en la narina, que se cierra en el momento de sumergirse para evitar la entrada de agua. Se puede sumergir a profundidades que rondan el metro, una vez en el fondo del arroyo, encuentra a sus presas volteando los guijarros.
Este ave selecciona ríos con buena calidad de agua y toleran moderadamente las actividades del hombre por lo que no es difícil observarlos en los cauces de nuestra comarca.
En la actualidad se llevan a cabo numerosas propuestas para evaluar y recuperar la calidad de las aguas de Cantabria, ejemplos de ello son el Proyecto Ríos y la Red Provoca entre otros. Desde aquí os animo a participar.
Con estos apuntes de nuestra 'torda marina' espero miréis de otra manera a nuestros pequeños vecinos cuando paseéis por las riberas campurrianas.
