Una de las grandes virtudes de la tecnología es que podemos adaptarla a nuestras necesidades. La otra cara de la moneda es que las decisiones recaen sobre nosotros los usuarios por lo que hemos de informarnos correctamente para acertar en nuestra compra.
Las tablet son ligeras, manejables y las podemos llevar a cualquier parte con facilidad. La batería dura mucho y en el mercado tenemos acceso a periféricos y adaptadores que nos permiten tener un dispositivo sumamente versátil. Si además es una tablet android tendremos la posibilidad de personalizar mucho la tablet e incluir aplicaciones muy potentes a precio muy bajo o directamente gratis.
Es cierto que cada uno de nosotros tiene unas necesidades tecnológicas diferentes e incluso manías y costumbres a la hora de trabajar pero para quienes hacen un uso doméstico de la tecnología, las tablet son cada vez más, una opción a tener en cuenta a la hora de renovar nuestro equipo.
Ya tenemos tablets de cuatro núcleos en el procesador, pantallas de alta definición, varios gigas de RAM y memorias potentes y ampliables. Por eso, salvo que necesitemos programas muy específicos y potentes, una buena tablet nos va a servir perfectamente para enviar correos, consultar las redes sociales, buscar información e incluso editar fotos, vídeos y documentos. El uso de teclados por usb o bluetooth lo hace todo aún más fácil de la misma forma que unos ligeros pero potentes altavoces nos permite escuchar música y ver vídeos sin problemas.
