Los vecinos de la calle Julióbirga se han levantado esta mañana con el sobresalto producido por un robo de madrugada en un frecuentado bar de Matamorosa. Según ha podido saber Vive Campoo, los ladrones han forzado la cerradura, rompiendo el bombín de la puerta, y una vez dentro han arrancado una de las alarmas, para después sustraer todo el tabaco de la máquina expendedora y varios licores. Además, han sacado al exterior dos máquinas recreativas para desvalijar el dinero de los cajones y después las han abandonado en una finca próxima al establecimiento.
Asimismo, se pudo comprobar que la alambrada del cierre de la parcela estaba manipulada a escasos metros de las máquinas, para permitir el paso de los ladrones hacia otra finca aledaña a la que se puede acceder con vehículo.
Este último hecho ha sido el que alertó esta mañana, a las 10 horas, a una vecina de la localidad -que regenta una tienda al lado del bar- y al abrir su negocio se le acercó una mujer para decirle que tenía la portilla de su finca abierta y al fondo había unos objetos voluminosos. Entonces se acercó para comprobar de qué se trataba, pues ella no había depositado nada en el interior de la parcela, y al aproximarse vio que eran dos máquinas ‘tragaperras'.
Acto seguido se lo comunicó a la dueña del bar, que en ese momento también iba a abrir. Ésta, sorprendida, no reparó en que había sido objeto de un robo hasta que al acercarse a la puerta del local observó que habían forzado la cerradura y ya dentro se dio cuenta de todos los objetos que le faltaban.
Por otra parte, ninguno de los vecinos consultados por este medio observó ningún movimiento ni oyó ningún ruido, que se ha tenido que producir en la madrugada de hoy, porque las personas que regentan el establecimiento precisaron que cerraron el bar las 23.45.
La propietaria, que sufrió el último robo hace más de tres años, llamó a continuación a la Guardia Civil, que se personó rápidamente en el lugar de los hechos con dos patrullas para recoger la pertinente denuncia.