A finales del pasado mes de mayo se cumplieron dos décadas desde que las antiguas escuelas de Villacantid, localidad de la Hermandad de Campoo de Suso, fueron rehabilitadas y reconvertidas en un edificio dedicado a actividades cívicas y culturales, una actuación que supuso una inversión de 153.000 euros y que significó un antes y un después en la vida comunitaria de la localidad.
El edificio, conocido como "La Universidad", había quedado en desuso tras el cierre de las escuelas siendo objeto en 2005 de un ambicioso proyecto de recuperación impulsado por la Junta Vecinal y cofinanciado por la Consejería de Cultura Turismo y Deporte que presidía Javier López Marcano. El objetivo era claro: dar una nueva vida a un espacio emblemático de la localidad, respetando su valor arquitectónico e histórico, y dotarlo de un uso que respondiera a las necesidades de los vecinos.
Desde su inauguración, el centro se ha consolidado como un verdadero punto de encuentro de vecinos de todas las edades. "Por eso, ante cualquier evento importante, la escuela es el punto natural de convocatoria". Para el alcalde pedáneo, Pablo Fernández, las escuelas están siempre abiertas para aquellos vecinos que lo soliciten, donde ellos puedan realizar eventos para distintas celebraciones. No realizamos talleres, aunque es algo que nos gustaría poner en marcha y, para ellos estamos trabajando de cara al año que viene. En las fiestas, apunta Fernández, ultilizamos el edificio como espacio para la muestra del concurso fotográfico que llevamos realizando desde hace varios años, así como, para entrega de premios, conmemoraciones y distintos eventos de la Junta Vecinal.
Organizado por la asociación Los Garvines y patrocinado por la Junta Vecinal y la Consejería de Cultura Turismo y Deporte el programa festivo del aquel 22 de mayo de 2005, comenzó a las 11 horas con la degustación de productos de la matanza campurruiana. A las 12 horas se inauguraron las obras y la apertura por las autoridades asistentes y la visita a sus instalaciones. Durante los actos acturaron la banda de gaitas San Pelayo de Naveda y también la ronda El Midiaju de Reinosa.
La reforna estructural de este edificio emblemático de la localidad, que fue donado por la marquesa de Villacantid, fue ejecutado por la empresa Depuram S.A. El antiguo edificio de las escuelas, que durante tantos años fue el centro de la enseñanza, tiene tras de sí no solo un valor histórico y arquitectónico, sino también una rica tradición popular.
Según siempre han contado algunos vecinos de más edad, existe una curiosa leyenda que ha pasado de generación en generación: en uno de los muros del edificio, la marquesa habría mandado colocar una onza de oro. No sabemos si es verdad o mito, pero lo cierto es que forma parte del patrimonio oral de Villacantid, y como tal, merece ser recordada.
Muros originales
La rehabilitación estructural respetó solamente los muros del edificio. La reforma comenzó por la cubierta, donde se utilizaron materiales aislantes, previo paso a la colocación de la teja. El espacio bajo cubierta de 60 metros cuadrados de superficie se quedó diáfano para uso exclusivo de la Junta Vecinal. Las actuaciones llevadas a cabo en el primer piso, con 140 metros cuadrados, fue de rejunteo de la pidera de las paredes, al igual que el resto del edificio en su parte inferior, donde se construyó el baño y un camerino.