En nombre de los hosteleros de Reinosa, y creo que también podemos hacerlo en nombre de los comerciantes, queremos dejar constancia de nuestra gran indignación ante la decisión unilateral tomada por el Equipo de gobierno (PRC-PP).
Nos parece una falta de respeto gravísima, por parte de esta institución, no dar lugar a la posibilidad de dialogo con el fin de llegar a una solución o acuerdo viable para paliar la dramática situación que están viviendo la hostelería y el comercio de Reinosa.
Lejos de mostrar empatía y solidaridad con la situación que vive su ciudad, lejos de aceptar las propuestas que les hicimos llegar para ayudar a paliar las consecuencias económicas de la Covid, el Equipo de gobierno de Reinosa en una decisión unilateral decide mandar por un wasap la decisión que ha tomado al respecto. Esta es: exención de las tasas de basura para aquellos locales que están cerrados.
Lejos ha quedado cuando el día de la manifestación bajaron en nuestro supuesto apoyo a la plaza del ayuntamiento por nuestras reivindicaciones, lejos de aquellas promesas de ayudar.
No es solo una falta de respeto hacia nuestras personas y negocios, consideramos que es una gran falta de respeto al estado democrático de derecho en el que vivimos, en el que el diálogo y la participación ciudadana son grandes pilares de este estado ellos han decidido estar por encima y no justificar una sola de sus decisiones y su negativa a nuestras propuestas.
Ni un informe de inviabilidad económica o un informe de inviabilidad legal por parte de los técnicos del ayuntamiento en los que tanto se escudan nuestros representantes.
Acordamos una segunda reunión la semana pasada, pero de una manera soberana y despótica, en lugar de llamarnos, de manera indirecta se han negado a recibirnos, comunicando por escrito la decisión que ha tomado el Equipo de gobierno.
La institución más cercana, la que más debería luchar por el fomento y el crecimiento del tejido empresarial de su ciudad una vez más nos ha dado la espalda y los comerciantes y hosteleros de Reinosa tenemos que quedarnos viendo como la mayoría de los ayuntamientos de Cantabria busca hasta debajo de las piedras la manera de ayudar al comercio y la hostelería de su municipio.
Una vez más nos quedamos con las ganas de poder sentir orgullo y gratitud hacia las personas que nos representan, esperemos que puedan continuar con la cabeza bien alta cuando den un paseo por su ciudad y al mirar hacia los escaparates de sus comercios y su hostelería solo vean sus persianas abajo con carteles 'Se vende', 'Se alquila', podrán decir con orgullo "Esto fue gracias a mi".