(Foto: Pinar de Bolmir y Retortillo, en las faldas del monte Cotío)
Son muy escurridizas y rara vez se dejan ver, pero habitan los bosques campurrianos, especialmente en los de coníferas. Hablamos de la ardillas, conocidas como ardillas rojas o comunes (Sciurus vulgaris).
Su cuerpo mide entre 20 y 30 cm y su cola entre 15 y 25 cm. Pesa de 250 a 340 g. Su pelaje es de color rojizo. Cuando llega el invierno aparecen unos penachos de pelos en las orejas. En sus patas anteriores ó manos tiene cuatro dedos mientras que en las posteriores tiene cinco. No presentan dimorfismo sexual.
Es habitante habitual de los bosques de coníferas, aunque también está presente en otras formaciones arbóreas. Desarrolla su actividad en los árboles, aunque no duda en bajar de ellos para recoger alimentos. Durante el día buscando y consumiendo frutos, semillas, cortezas e incluso insectos, huevos y aves. No hiberna sino que se mantiene activa consumiendo lo que ha ido almacenando en diferentes oquedades de los árboles y las rocas.
Fuente: Wikipedia
