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Seguridad informática

Medidas de seguridad informáticas que deberías adoptar ya

Principales medidas que deberías adoptar para evitar que los piratas te den un disgusto

El refranero español, que es muy sabio, lo dice bien claro: más vale prevenir que curar. Y cuando se trata de nuestra seguridad, todavía más si cabe, ya que toda prevención es poca. En este artículo presentaremos las principales medidas que deberías adoptar para evitar que los piratas te den un disgusto.

Sin candado no hay trato

Fuente: Pixabay

Actualmente, internet es mucho más que meras páginas web informativas. Usamos la red para realizar pagos, por ejemplo. Dos sectores en los que la seguridad a la hora de pagar es capital son el del comercio electrónico y el del juego en línea. Los comercios y los casinos seguros han implementado una medida clave que los usuarios pueden comprobar fácilmente desde sus dispositivos informáticos: el candado cerrado. Se trata de un símbolo que puede verse en la barra de direcciones de nuestro navegador web favorito y que, con su presencia, nos confirma que estamos utilizando una conexión de acceso encriptado segura, gracias al protocolo HTTPS. Por este motivo, es recomendable que no facilites tus datos de pago en páginas web que no cuenten con esta medida de seguridad fundamental. No merece la pena jugársela (la mayoría de los ataques fraudulentos de phishing se realizan desde páginas web que no tienen este protocolo de seguridad).

 

Cuidado con las fuentes no oficiales


Un gran número de problemas de virus, troyanos y demás dramas informáticos diversos se debe a la instalación de aplicaciones y programas pirateados. Ahorrarse unos euros puede pagarse muy caro cuando hablamos de seguridad informática. Se han dado casos de vaciados completos de cuentas corrientes por la instalación de keyloggers (pequeñas aplicaciones maliciosas que registran las pulsaciones del teclado) tras una instalación ilegal de software. Al iniciar una instalación así, el incauto usuario puede instalar sin su conocimiento un keylogger que, pacientemente, espera a que teclee en su banca online sus credenciales de acceso para acceder ilegalmente a su dinero. ¿De verdad merece la pena arriesgarse a un escenario así por no querer rascarnos el bolsillo? En nuestra opinión, la respuesta es más que evidente. 

Fuente: Pixabay


Autenticación en dos pasos mejor que en uno


Incluso si prestamos atención a navegar solo por páginas web seguras y adquirimos nuestros programas informáticos exclusivamente por medio de vías legales, todavía corremos un riesgo muy grande: el uso fraudulento de nuestras contraseñas. Por lo general, el usuario medio tiene cuentas de acceso fáciles de descifrar, con contraseñas débiles que pueden romperse mediante un simple proceso de ensayo y error masivo (lo que se conoce como proceso de obtención de contraseñas por fuerza bruta). También podemos sufrir el robo de nuestra contraseña por algún descuido nuestro.

Sea como sea, existe una medida de seguridad extra que permite preservar la integridad de nuestras contraseñas incluso en escenarios como los que acabamos de citar. Consiste en proteger nuestras credenciales de acceso mediante lo que se conoce como autenticación en dos pasos. Utilizando una aplicación para el móvil como Google Authenticator, tras introducir nuestro nombre de usuario y contraseña deberemos introducir un código temporal que se regenera cada 30 segundos de manera sincronizada con el servidor para confirmar que realmente somos nosotros. Se trata de una medida que ha evitado muchos accesos no autorizados hasta la fecha en todo el mundo. Es gratis, así que corre a configurar tu autenticación en dos pasos si no lo has hecho ya.

Hoy en día nuestra vida está en un ordenador: desde nuestros documentos de trabajo y nuestras fotografías más personales hasta los datos de nuestras cuentas bancarias. Es por ello que implementar estas medidas debería ser tan común como poner el cerrojo a la puerta de la casa antes de salir.