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Sociedad | Campoo de Suso

Mazandrero restaura la fuente centenaria de 'Los Leones'

La iniciativa ha sido posible gracias al trabajo del constructor José Ignacio Puente, el apoyo ciudadano y la Junta vecinal

La fuente centenaria de 'Los Leones' de Mazandrero, todo un símbolo de la localidad de la Hermandad de Campoo de Suso, acaba de ser restaurada gracias al apoyo vecinal, el Equipo de gobierno local y al trabajo del constructor José Ignacio Puente Cayón, que ha desarrollado un minucioso trabajo, "respetando en en su totalidad su arquitectura inicial y los mismos materiales" empleados para su levantamiento en 1911.

Una actuación destinada a la conservación de esta "moderna e innovadora estructura adelantanda a su época", precisó el alcalde pedaneo Roberto Puente, tanto por su construcción en forma de pirámide tetraédrica, de la que a su vez sale de cada cara la parte superior del cuerpo y la cabeza de un león, como por los materiales de conglomerado de cemento y piedra artificial empleados a principios del siglo xx en su construcción.

"Es un orgullo ver como se ha recibido el apoyo de los vecinos de la localidad que sin su disposición en la elaboración y dotación presupuestaria e incluso con aportaciones económicas particulares, no hubiera sido posible materializar este proyecto, tampoco queremos olvidar a todos los que nos han acompañado diariamente desde el inicio de las obras, gracias a todos por vuestra dedicación, colaboración e implicación", subrayó el pedaneo.

En la misma línea, desde el Equipo de gobierno de la localidad campurriana, subrayaron el esfuerzo realizado por el constructor José Ignacio Puente Cayón, al hacer a la vez de "conservador y restaurador".

Un pueblo con un rico patrimonio arquitectónico

La fuente de 1911 está rodeada por el notable patrimonio arquitectónico que posee la localidad; las numerosas casas de estilo barroco con la portalada típica campurriana, la casona de los Martínez del siglo XVII, la iglesia de San Lorenzo del siglo XVII, como el palacio de estilo montañés del siglo XX cuyos propietarios, la familia Obeso-Palacio fueron los que originalmente costearán la construcción y posteriormente cedieran la fuente a la localidad.