Como todos los años por estas fechas, los miembros del Grupo de Empresa de Gerdau de Cicloturismo celebraron su marcha social, un evento que acaba de cumplir 35 años.
Carrión de Los Condes, Benavente, Zamora, Arévalo y Peñafiel fueron las finales de las cinco etapas que completaron estos amantes del ciclismo. En total, 600 kilómetros por tierras de Castilla y León.
Disfrutaron y sufrieron dando pedales por tierras castellanas. En la segunda etapa les calló un autentico diluvio, que junto al fuerte viento de cara, además de siete pinchazos y una caída sin consecuencias, convirtieron una jornada de ocio en un autentico infierno, que afortunadamente terminó en la ciudad zamorana de Benavente, donde ya les esperaba el sol.
En la cuarta etapa, entre Zamora y Arévalo, la más dura de todas, tuvieron que afrontar una decena de subidas fuertes de entre uno y dos kilómetros, y largas rectas, siempre con el viento adverso.
Finalmente se llegó a la localidad Vallisoletana de Peñafiel, donde los más fuertes se atrevieron a subir las duras rampas que llevan al Museo del Vino o al castillo, en la cota más alta de la ciudad.
Los cicloturistas del Grupo de Empresa de Gerdau culminan así esta marcha que durante 35 años ininterrumpidos llevan realizando, y que en bicicleta han llegado a Galicia, Asturias, Extremadura, Castilla La Mancha, Castilla y León, La Rioja, Aragón y han pedaleado por otras comunidades como Navarra, Pais Vasco y Madrid.