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Medio Ambiente | Reinosa

"La limpieza del Híjar llega tarde, de manera ilegal y no soluciona el problema"

Bernardo García González, vicepresidente de Ecologistas en Acción en Cantabria

Ecologistas en Acción de Cantabria, a través de su vicepresidente, el campurriano Bernardo García, lamenta en un comunicado la actuación de la Confederación Hidrográfica del Ebro en la limpieza del cauce del río Híjar, criticando la demora en los plazos de ejecución, asegurando que "han burlado la legalidad" y que la medida no soluciona los problemas reales generados por las crecidas del río.

En este sentido denuncia que "después de años de inacción injustificable, se ha llegado tarde y mal, algo que además se ha hecho recorriendo a atajos injustificables para eludir la legalidad, concretamente el cumplimiento de la Ley de Control Ambiental de Cantabria, sorteando trámites fundamentales como es la evaluación de impacto. Algo inadmisible para cualquier particular o empresa y por ello mucho más cuando es la propia administración pública la promotora".

Y es que según Bernardo García, "los graves problemas de inundabilidad que existen en Reinosa son consecuencia fundamentalmente de la nefasta gestión, dejación de funciones, falta de rigor y manifiesta temeridad, tanto de la CHE como por parte también de las distintas administraciones locales a lo largo de mucho tiempo".

Situación que a su juicio ha motivado que desde hace años exista un riesgo notable de inundaciones que ha producido "daños considerables" que exigían la adopción de medidas al respecto.

Asimismo, el ecologista opina que las soluciones tradicionales adoptadas en el pasado "han puesto en evidencia su ineficacia y lo contraproducente de las mismas", como por ejemplo el dragado realizado en el año 2006.

"La única apuesta razonablemente sensata" fue la del Parque Fluvial Híjar Ebro, con un presupuesto 5 millones de euros, cuya partida estaba aprobada y cofinanciada por parte del Ministerio y Consejería de Medio Ambiente, pero que finalmente fue suspendida en noviembre de 2013, argumentando "la excusa de la crisis económica, aunque poco tiempo antes -y en plena crisis- la CHE había tirado literalmente una cantidad similar en un puente como el de Orzales que no va a ninguna parte y tenía soluciones mucho menos onerosas", asegura el vicepresidente del colectivo.

Sobre el inicio de las obras de limpieza del cauce del Híjar, Bernardo García, recalca que "como siempre se ha realizado a destiempo y a contrarreloj", y que tenían la autorización de la Consejería de Ganadería para ejecutarlas como plazo máximo hasta el 30 de septiembre, con una estimación de dos meses para realizarse, con lo cual deberían haber comenzado el 1 de agosto. Y matiza que no empezaron hasta el 3 de octubre, después de concederles una prórroga de un mes, "por tanto en el mejor de los casos este año solo podría ejecutarse la mitad del proyecto, pero dado lo avanzado de las fechas, han comenzado las lluvias de otoño y difícilmente se podrá cumplir ese mínimo objetivo", lamentó.

En cuanto al proyecto, "aunque incurre en los mismos errores y vicios del pasado", el ecologista reconoce que "al menos no es una aberración total", pero sigue siendo "una medida paliativa que básicamente no ataja el problema y, en muchos casos, actúa de efecto placebo en cuanto prevención de riesgos se entiende, particularmente en lo referido al tramo de la Avenida de La Naval".

Cómo y dónde actuar

Como soluciones a los problemas de inundaciones que generan las crecidas del Híjar, se remite a las propuestas del proyecto del Parque Fluvial, donde se recogía que "lo primero es atajar el problema aguas arriba".

En este sentido, Bernardo García explica que el documento recoge que hay que deshacer el actual encauzamiento al menos desde Villacantid eliminando las motas (caballones de tierra a cada lado del río) para que pueda recuperar su
cauce natural con sus meandros. En la zona de las eras de Matamorosa retirar los acopios de la cantera El Salceral y rellenos de la planta de Emilio Bolado al objeto de crear una zona de inundación. Todas estas medidas tienen por objeto restar velocidad y energía a las crecidas para detener el actual proceso erosivo y de arrastre de sedimentos aguas abajo.

Además, en la margen izquierda, en el tramo urbano de Reinosa y fundamentalmente del puente de Gerdau hasta la Barcenilla, hay que retranquear la orilla retirando posiblemente más de cien mil toneladas de tierras y residuos agrandando mucho más la actual sección del cauce, preferiblemente en la orilla derecha, con lo cual se eliminaría parcialmente peligrosos rellenos de escorias.

Por último, ya en la zona de Vista Alegre, habría que acometer el reperfilado de las orillas en la confluencia del Híjar con el Ebro con la retirada de gran cantidad de residuos, porque los rellenos han cambiado el curso del Híjar de manera que desemboca de forma completamente perpendicular al Ebro, pero con mucho más caudal que este último, lo que está actuando como un auténtico tapón y cuyo problema se traslada a la zona del Campo Colorado, concluye el ecologista en su planteamiento.