"La apuesta por la calidad de la leche siempre tiene recompensa, y Cantabria es una alumna aventajada. Tanto en el aspecto físico químico, con el 3,62% de grasa y 3,14% de proteína, como en el higiénico-sanitario. Estamos al nivel de países de lo más avanzado, como Holanda, y más del 84,81% de las explotaciones de Cantabria tienen calidad Súper A. Ese es el único camino posible en un horizonte sin cuotas". Lo ha dicho hoy la consejera de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, Blanca Martínez, que ha dado a conocer los actos organizados por el Laboratorio Interprofesional Lechero de Cantabria (LILC) mañana jueves en La Magdalena, Santander, con motivo de su 25 aniversario.
Enrique Ortiz, presidente del LILC, será el encargado de abrir la jornada a las 10 horas. Se han programado además tres ponencias a cargo del veterinario Álvaro Lagüera (Del ganadero tradicional a la empresa productora de leche); el director del Global Food Industry Elanco Theo Queis (Análisis de estrategias en diferentes países para la competitividad y la sostenibilidad) y, finalmente, Harrie van der Bijgaart, director de Qlip, que disertará sobre el pasado, presente y futuro de los análisis lácteos desde la perspectiva holandesa. La clausura, que correrá a cargo de Martínez, se ha programado a las 13.30 horas.
Para la consejera, es una excelente oportunidad para "reconocer no sólo el papel esencial que el Laboratorio ha desempeñado en esta tierra desde 1990, sino también para tomar conciencia de que debe seguir jugando un papel protagonista en el futuro". En este sentido, recordó que el LILC ha realizado en 2014 un total de 7.137.383 pruebas analíticas, lo que representa el 1,5 % más que el año anterior, incluyendo los diversos tipos de matrices, tales como productos lácteos (leche UHT, leche en polvo, queso, leche concentrada, yogurt, etc.), y productos de pastas de dientes, colutorios y cosméticos.
Martínez destacó también que "las muestras de control lechero de las ganaderías de Cantabria se han incrementado hasta alcanzar las 389.468, lo que representa un 4% más que el año anterior y pone de manifiesto el continuo esfuerzo de la Administración y de los propios ganaderos por mejorar la genética y la salud de nuestras vacas de leche". "Somos líderes en España en control lechero y el objetivo es mantenernos a la cabeza. Hoy por hoy en mi equipo no contemplamos otro escenario", añadió.
La consejera resaltó finalmente cómo el LILC ha seguido realizando en 2014 la analítica de urea y cetosis en leche cruda de vaca de Cantabria, y subrayó cómo pese a haberse incrementado la producción, la presencia de algún tipo de inhibidor en la leche cruda es prácticamente nula. Además, expuso, en el caso de que se encuentre algún positivo en las analíticas, el protocolo de control de inhibidores in situ por el LILC hace imposible que esta leche llegue ni siquiera a las fábricas.