El entorno de la ermita de Los Cagigales se llenó de gente para celebrar la XXVI Jornada de Voluntariado, que responsables de la Hospitalidad Diocesana organizan el último sábado de mayo.
A esta jornada de convivencia asisten desde 1987 compañeros y amigos de Corrales, Santander, Castro, Torrelavega y Cabezón, junto con personas con alguna discapacidad y varios voluntarios de El Dueso.
El encuentro comenzó, como siempre, con la misa de agradecimiento, que fue presidida por el padre Emilio Maza y cantada por la ronda La Esperanza de Requejo. Seguidamente tuvo lugar la comida de hermandad y juegos
