Un mujer de Matamorosa frustró en la madrugada del miércoles al jueves, a las 3.00 horas, el intento de robo de un ladrón en una carnicería de la capital de Campoo de Enmedio, cuando el individuo intentaba romper la luna de seguridad con un objeto contundente -un hacha o una maza, según la testigo-, y fue sorprendido por la vecina de la casa contigua al inmueble justo en el momento en que se había despertado.
Al instante, y sobresaltada por un golpeo continuo, se asomó a la ventana y vio a un hombre "joven, alto y delgado" arremeter violentamente con el objeto contra el cristal blindado. Al observar la escena, la mujer comenzó a increparle y los gritos consiguieron que el ladrón cejase en su empeño; se subió la capucha de su cazadora y huyó hacia una plaza de próxima, desde donde escapó subido a un vehículo que los testigos no llegaron a ver pero sí oír.
Media tonelada de carne a la basura
Momentos después del intento de robo, la vecina acudió a casa del propietario de la carnicería, que vive a escasos metros del local, para comentarle lo sucedido. Fue entonces cuando el dueño se acercó a su negocio, donde le esperaban otros testigos y vecinos de la zona para informarle de la situación y acto seguido llamó a la Guardia Civil. Sobre las cuatro de la madrugada, apunta el carnicero, se personó una patrulla procedente de Los Corrales de Buelna para recoger los datos de la denuncia.
Ya en el local, su dueño observó el estado que presentaba la tienda y aunque el ladrón no pudo acceder al interior, lo que sí hizo fue destrozar la luna y con ello provocó que saltasen numerosos cristales incrustándose sobre la carne "como agujas". Una vez contemplado su estado, no le quedó más remedio que tirar a la basura unos 500 kilos de alimento y otros 100 kilos de legumbres al estar llenos de los restos de cristal.