Pisadas y excrementos de oso han sido localizadas y son visibles en la zona conocida como la Carrera del Valle, en la zona de las Sanguijuelas, camino al nacimiento del río Besaya, en terrenos de Fresno del Río. Este pasado domingo un vecino de esta localidad de Campoo de Enmedio, identificó unas huellas y un excremento de oso, con ingesta de ciruelas y un conglomerado de pepitas. Al parecer, se trataría de un osezno de unos 16 meses, que se habría enmancipado, una etapa complicada en el desarrollo de estos plantígrados.
Además, en este pueblo de Fresno del Río, hace unos días unos lobos, por lo menos dos según comenta su propietario, mataron a un poni que se encontraba en una finca próxima a la que reside Jorge Díaz, el dueño del animal. "Era uno más, se lo regalé a mi hija cuándo cumplió su primer añito. Compré en Ruiloba y ya tenía 18 años. Cuando entré en la finca con mi perra la noté que el pelo se la erizaba y, estaba super excitada", explica Díaz, para añadir que "la intenté tranquilizar, pero enseguida escuché unos ruidos y ya vi al animal muerto y a dos lobos que se quedaron mirándome unos segundos, para salir huyendo por una finca colindante dirección a Reinosa".
"Nuestra finca está cerrada con estacas y con alambre enrejado de rombos. Tras ver huir a los lobos me desplacé de nuevo a casa para avisar del ataque y cuando regresé a la finca los ejemplares se encontraban de nuevo junto al animal del que ya se habían comido la mitad. Estuve en la finca hasta las 2.00 horas y, cuando me levanté a las 8, del poni solamente quedaban carrilleras, pellejo y huesos", se lamenta Díaz.