La Guardia Civil en la denominada operación "semáforo", ha procedido a la imputación de un hombre como presunto autor de un delito de sabotaje informático contra una empresa de Cantabria, la cual permaneció a consecuencia del ataque durante dos días sin tener conexión tanto interna como a internet.
El pasado 6 de enero se puso en conocimiento de la Guardia Civil que una empresa de la Comunidad Autónoma de Cantabria había sufrido un ataque a su sistema informático, accediendo al mismo de forma remota y produciéndole el borrado de configuración que le permitía tener enlace tanto en el interior de la misma como a internet. Dicho ataque causó un perjuicio económico cuantificado en casi los 3.000 euros.
Comenzada una investigación por efectivos del Equipo de Delitos Tecnológicos (EDITE) de la Guardia Civil de Cantabria pudieron averiguar que el autor del ataque se había enmascarado con la línea de internet de otra empresa para evitar ser detectado.
Tras múltiples gestiones e indagaciones y gracias a los rastros que quedan en la red, los agentes del EDITE pudieron averiguar la identidad del presunto autor del ataque, averiguando que la posible motivación podía ser una antigua relación empresarial, procediendo el pasado día 5 de febrero a su imputación.