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Cartas al director

Gracias Hospital Tres Mares

Emotiva carta de una mujer que ha perdido recientemente a su padre y quiere agradecer al personal del centro el trato recibido

Hace unos días en el Hospital Tres Mares nos dejó nuestro padre. Pasamos por él durante años primero esporádicamente, últimamente alguien muy "agudo" me decía que allí me empadronaría.

De nuestro peregrinar por urgencias, ingresos, hospital de día, especialistas y domiciliaria fuimos conociendo grandes personas.
Nuestro agradecimiento por el cariño recibido desde celadores, limpiadoras, recepción, auxiliares, médicos, enfermería y cocinera cercana...

Nombres no daré pues alguno quedaría en el tintero. De la mayoría sé sus nombres o apellidos. Me quedo con el apodo con el que mi padre les llamaba.

Hoy nos tocó ojos lindos, más linda su persona. Otro que sin ser cántabro es del norte de Santander, la rubia de rizos que durante años le sacó adelante, el serio doctor que lo dice todo con la mirada, ese celador que a la Ermita de la Luz quería llevarle, ese doctor tan bueno de risa callada que rodeado de bellas sonrisas venía a casa, ese buen equipo de ambulacieros que nos llevaba, muchos zapatos desgasté dando vueltas en la entrada.

Sus últimos días fueron difíciles pues la Sanidad está afectada.

Entramos por donde siempre, exhausto mi padre, yo sobrepasada y un abrazo hizo que mi mirada " izara". Me sentí arropada.

Pasaban los días, aunque yo sabía lo que mi padre necesitaba. Pero como si de un golpe de estado se tratará no fui escuchada. En ese su camino hacía el final, ángeles se nos cruzaban, "amparo" nos daban en ese "tormento" que nos dinamitaba, personas nuevas que prácticas realizaban.

Hubo un ángel de melena rizada que no pauta aínes, te da recetas como si de fogones tradicionales se tratarán, hizo que nuestro sufrimiento acabará pues de llegar al final se trataba.

Menos mal que alguien desde su nube nos ayudaba.

GRACIAS HOSPITAL TRES MARES, sobre todo a esas personas que saben cuanto me gustan las cucharas de madera, los bizcochos y las galletas enlatadas...