El Gobierno de Cantabria y los sindicatos CCOO, CSI-CSIF, UGT y la Federación de Servicios de Educación y Sanidad (FSES) firmaron ayer por unanimidad en el seno de la Mesa General de Negociación el acuerdo por el que los empleados públicos autonómicos recuperan la parte que quedaba pendiente de la paga extra, que el Ejecutivo del Partido Popular no pagó en 2012.
El acuerdo beneficia a 19.600 empleados públicos del Gobierno autonómico, entre personal funcionario, estatuario y laboral, que recuperarán el 49,6 por ciento de la paga extra que quedaba por percibir y que será abonada en dos plazos, el primero antes del 30 de junio. El segundo de los pagos se efectuará en el tercer trimestre de 2016, tal y como se comprometió el consejero de Presidencia y Justicia, Rafael de la Sierra.
El Gobierno ha convocado la Mesa General de Negociación para alcanzar el mencionado acuerdo al disponer del certificado de suficiencia financiera emitido por la Consejería de Economía y Hacienda, un documento que compromete el abono pendiente de la paga extraordinaria, a lo que se destinará un total de 18,5 millones de euros.
Este acuerdo en el seno de la Mesa General de Negociación se une a otros anteriores que han supuesto la restitución de los días libres suprimidos a todos los empleados públicos.
Como ha explicado el consejero, "ha sido necesario tramitar el correspondiente expediente económico-financiero y esperar el certificado de suficiencia de la Consejería de Economía y Hacienda", respetando los nuevos escenarios económicos y la situación del déficit.
De la Sierra ha apuntado que el Gobierno demuestra una vez más su compromiso con los trabajadores públicos y la mejora de los servicios ofrecidos al ciudadano. Según ha señalado, es un objetivo de este Gobierno la recuperación de los "derechos perdidos" de los empleados públicos, instaurando un "constante diálogo social" con los representantes de los trabajadores y que no existía en la anterior etapa del PP.