La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente y la Policía Especialista en Gestión Aeronáutica y de Seguridad Operacional (PEGASO) de la Guardia Civil en Cantabria coordinarán el control aéreo en los espacios naturales protegidos con el fin de reforzar la seguridad ciudadana y la protección del medio ambiente en la Comunidad Autónoma.
Así lo han acordado el consejero del área, Guillermo Blanco, y el responsable de esta unidad especializada de la Guardia Civil en Cantabria, el sargento Eugenio Hoya, en un encuentro celebrado en la sede de la Consejería y en el que también ha estado presente el subdirector general de Medio Natural, Ángel Serdio.
La labor de coordinación consistirá, tal y como han explicado, en que la Consejería se encargará de comunicar a la Guardia Civil todas las solicitudes que reciba para realizar autorizaciones de vuelo en los espacios naturales protegidos de Cantabria, que representan una tercera parte del territorio de la Comunidad Autónoma y un espacio aéreo de hasta 3.000 metros de altura.
La Dirección General de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, competente en la materia, también informará al instituto armado sobre todas aquellas solicitudes que autorice y que estén relacionadas con el uso tanto profesional como recreativo de aeronaves pilotadas por control remoto, comúnmente conocidas como drones, además de otro tipo de aeronaves e instalaciones aeroportuarias como el helipuerto de Jaedo, en Ruente.
Por su parte, el equipo PEGASO en Cantabria se encargará de comprobar el estado de todos aquellos equipos de aviación que cuentan con la autorización de la Consejería para realizar vuelos en los espacios naturales protegidos de Cantabria y vigilar a todos aquellos que solicitaron la autorización y finalmente no la consiguieron para evitar posibles prácticas ilegales.
También se encargará de realizar inspecciones en instalaciones y entidades relacionadas con la aviación general en la región e impartirá actividades de concienciación orientadas a usuarios de aeronaves de aviación ligera y drones, además de investigar hechos delictivos en estos ámbitos.
El consejero de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha destacado la importancia de esta coordinación, en su opinión, "muy necesaria" a la hora de reforzar la seguridad ciudadana y la protección del medio ambiente ante los nuevos retos y amenazas del espacio aéreo, tales como el auge del uso de drones, sobre todo, con fines recreativos.
"Cada vez hay más gente que usa drones en Cantabria, pero existe un gran desconocimiento sobre sus condiciones de uso, ya que muchos no saben que se necesita un permiso para poder utilizarlos", ha advertido Blanco, quien ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que respete el espacio aéreo por el "bien de todos y de la naturaleza".
Además, ha puesto en valor el trabajo que realiza la Guardia Civil en Cantabria en beneficio de la protección del medio ambiente y ha reafirmado la predisposición del Gobierno de Cantabria de seguir colaborando de manera estrecha con esta institución en aras de la mejora de la seguridad y la prevención en la región.
Por su parte, el responsable de esta unidad especializada de la Guardia Civil en Cantabria, el sargento Eugenio Hoya, ha destacado que esta coordinación servirá para proteger, "aún más si cabe", el espacio aéreo de Cantabria y ha defendido la prevención como la mejor herramienta de seguridad pública y de protección del medio ambiente.
En este sentido, ha subrayado el papel fundamental que desarrolla el equipo PEGASO tanto en Cantabria como en España como "un referente único" en materia de control del espacio aéreo que sigue las recomendaciones marco de INTERPOL para las actuaciones ante incidentes con drones, helipuertos, aeródromos, clubes de aeromodelismo, ultraligeros, paramotores e infraestructuras de aterrizaje y despegue de aeronaves.