En el Programa electoral del PRC para las Elecciones municipales de Reinosa de 2.019, se recogía un catálogo de (sin duda) buenas intenciones, entre las que merece la pena destacar la que hacía referencia al comercio reinosano con un eslogan de lo más llamativo: "Por un comercio local en auge". Obviamente, proyectos como el reseñado le ayudaron al PRC a obtener los buenos resultados electorales que cosechó.
Y es ahora, transcurridos 4 años, cuando se puede comprobar que dicha promesa, como tantas otras, ha resultado ser un lamentable, frustrante engaño, sobremanera para los sufridos comerciantes de la localidad, los cuales, al contrario de lo que decía la publicidad de los regionalistas de derechas, han visto como, a la drástica disminución de la población derivada de la falta de trabajo, a las riadas, a la terrible pandemia padecida, han debido sumar los incumplimientos, la ineptitud del gobierno (es un decir) que han (hemos) padecido durante esta inacabable, por lóbrega, legislatura.
Así, no hay más que darse una vuelta por nuestro desangelado municipio para constatar, nostálgicamente, la gran cantidad de negocios, algunos de ellos enormemente antiguos, que se han visto obligados a cerrar sus puertas como derivación de, además de los desastres naturales antes descritos, a la más absoluta ausencia de iniciativas, de proyectos tendentes a incentivar la deprimida economía reinosana por parte de los ediles municipales que, en coalición, han gobernado este Ayuntamiento.
Esos defraudados comerciantes, hartos de tamaña incompetencia, de tanto pasotismo, han orientado sus quejas, sus reclamaciones nunca atendidas, a Izquierda Unida, haciéndonos partícipes de su sentimiento de desamparo derivado de la absoluta ausencia de respaldo por parte de la coalición de derechas PP - PRC.
Y, en el contexto del calamitoso estado del comercio de Reinosa, la hostelería se lleva la palma. Y ello se debió básicamente a que la Covid19 les golpeó especialmente en toda su virulencia durante la larga etapa de confinamiento. Aunque, en el conjunto del Estado español, a fin de tratar de paliar el desastre económico de este colectivo en la medida de lo posible, se les concedió la apertura de terrazas, con más mesas de las habituales y con exención del impuesto municipal, en nuestra población tal medida fue a todas luces insuficiente.
Aunque es cierto que, dentro de la dramática situación económica antes descrita, la exoneración del pago de estos tributos, les permitió, sobre todo a los bares de esta localidad que tenían espacio para terraza, "levantar cabeza". Pero los gobernantes del municipio reinosano debieron pensar que estos establecimientos "ganaban mucho", y así, cuando estaban comenzando a recuperarse, durante los meses transcurridos entre mayo de 2022 y abril 2023 ya tuvieron que volver a satisfacer (considerables) impuestos municipales, si bien se les "permitió" mantener el número de mesas que tenían en plena epidemia.
Si bien (mal) al equipo PP - PRC, para el cual tal parece que las tasas sufragadas por los hosteleros no son elevadas en modo alguno, así como, sin duda, en cumplimiento de la promesa electoral (electoralista) "Por un comercio en auge", ha considerado que hay que recaudar más de los modestos dueños de los bares (se trata de la máxima preferida de la derecha: a los que padecen mayor penuria, mayores tributos).
De modo que el Concejal de comercio del Ayto. de Reinosa por el PP, D. José Luis López Vielba, se ha permitido enviar una atenta (para los sufridos cotizantes conmovedora) carta, remitida en fecha 03.04.23, por la que se les comunica que la "autorización" de terrazas para 2023 tendrá efectos retroactivos, en cuanto al número de mesas, a la concedida para 2.019.
Con lo cual, si los referidos comerciantes pretenden (porque lo necesitan para subsistir dignamente) mantener las mesas que tienen en la actualidad, deberán satisfacer, según lo recogido en la tarifa que les ha facilitado en lo referido a establecimientos de 1ª categoría (?), 88,00 "módicos" euros por cada mesa de 4 sillas, siendo 74,00 euros para los de 2ª categoría, así como otras cuantías aún más "modestas" tales como, respectivamente, 69,00 € por cada tonel, posavasos o similares, y 58,00 € para locales, sean éstos de 1ª o 2ª categoría.
Ni más ni menos, esas "progresistas" medidas significan, para los señores ediles de PP y PRC, poner los medios necesarios tendentes a "relanzar" el comercio en nuestra ciudad.
A nadie se le puede escapar que es imperioso acabar con los nefastos gobiernos municipales que ha sufrido Reinosa durante años y años, que es preciso terminar con la alternancia entre los partidos que se han sucedido para que nada varíe, para hacer, y deshacer, a espaldas de sus vecinos cuando no en contra.
Esta es la oportunidad: en las próximas elecciones de Reinosa del 28 de mayo habrá candidatura de la izquierda transformadora, concurrirá la coalición IU - Podemos. Nuestra ciudad vive como nadie el dolor de la falta de empleo, e Izquierda Unida y Podemos tendrá que ser el espacio sobre el que se construya la esperanza.
Hay que gobernar, como decía Emiliano Zapata, obedeciendo al pueblo.