Gamesa ha planteado un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) que afectará a 152 de los 155 empleados con los que cuenta la compañía en su planta de Miranda de Ebro, especializada en la fabricación de hélices para aerogeneradoras.
En concreto, el expediente de suspensión temporal se extenderá tres meses, desde agosto hasta octubre de este año. La adopción de esta medida ha estado motivada por el retraso de algunos pedidos. Sin embargo, según explica la empresa, se tratan de medidas "circunstanciales" que se toman porque el mercado eólico es "volátil" y para ajustarse a las demandas del mercado.
En 2013, Gamesa redujo en 2.600 personas el número de empleados con respecto a 2011, como parte de su estrategia de racionalización de gastos, con la que pretendía reducir en 100 millones sus costes fijos y que incluyó otras medidas, entre ellas las relacionadas con ajustes en los servicios externos.