Las sutiles formas con las que el hielo, la niebla y la nieve transforman la Montaña Palentina son, sin duda, las protagonistas de la muestra fotográfica 'El frío que vino del Norte' que podrá verse hasta el mes de julio, en el centro expositivo Rom, ubicado en el monasterio de Santa María la Real, en Aguilar de Campoo.
"No es Siberia, pero, a veces, lo parece", comenta la autora de las fotografías, Conchi Pérez, quien explica que "el invierno es una estación fría, pero no por ello, deja de ser bella". Para demostrarlo ha captado con su cámara, imágenes de hielo, nieve y niebla, en el entorno de Aguilar de Campoo y su comarca, dentro del Parque Natural Montaña Palentina.
Fotografías de una delicadeza sublime que invitan a la reflexión, la quietud, el misterio y el romanticismo. "Mi pasión por la naturaleza me llevó a estudiar biología y el descubrimiento de la fotografía me ha enseñado a mirarla desde otra perspectiva", comenta. Un punto de vista que comparte con el espectador a través de esta serie de fotografías, en las que el frío y las distintas tonalidades de blancos y grises cobran protagonismo, en un efecto espejo que atrapa desde el inicio la mirada del visitante.
"Me gusta mostrar la riqueza de nuestros paisajes, de nuestra flora o fauna, quiero que el mundo sepa lo que tenemos, porque pienso que solo aquello que se conoce se ama, y el ser humano no será capaz de destruir tanta belleza", asegura. La fotografía es el medio elegido por Conchi para hacer llegar al público su visión de las cosas, para compartir con ellos su afición, su pasión y su experiencia.
Otra de sus aficiones, confiesa, es viajar y, ambas, fotografía y viajes, le permiten olvidarse del tiempo y el espacio. "Mis dos pasiones, me abren la mente y aprendo a ser mejor persona", afirma. "La cámara me permite mantener las imágenes de esos paisajes majestuosos durante mucho más tiempo en mi retina. Cuando viajas ves qué pequeño lugar ocupas en el mundo".
Con la convicción de que "viajar nos hace más más tolerantes", Conchi muestra al espectador los paisajes que previamente han captado su atención y, de algún modo, han tocado su alma. Los rescata, los inmortaliza y, cómo no, los comparte, para que, como diría otro gran ecologista y divulgador, Joaquín Araújo, su visión "nos atalante".
La exposición fotográfica podrá verse hasta el mes de julio en el horario habitual del museo, que abre de martes a viernes de 16 a 20 h. y los festivos y fines de semana de 10 a 14 y de 16 a 20, con visitas guiadas cada hora. Además, esta semana, con motivo de la celebración, el sábado 18 de mayo, del Día Internacional de los Museos, quienes se acerquen al monasterio de Santa María la Real, podrán disfrutar de la visita, de la exposición fotográfica y, además, se llevarán un pequeño obsequio.