"Año 2021, el libre mercado en un mundo globalizado dicta las normas; las políticas neoliberales, las ETTs o la reforma laboral han asestado un duro golpe a los sindicatos en un tiempo donde el Estatuto de los Trabajadores tienen la misma solidez que un clínex.
En la Casa del Pueblo de UGT de Reinosa, todavía resiste un sindicalista con desbrozadora que tienen que acceder al despacho para estampar su firma en un pacto por el empleo que garantizará la creación de un 15% más de puestos de trabajo en la comarca con contrato indefinido.
Adéntrate en esta selva y encuentra el documento mágico antes de que acabe la legislatura para que el acuerdo social sea una realidad. Tienes de plazo hasta las próximas elecciones".
Este es el argumento que se nos ha ocurrido para una ‘escape room' y dar una nueva vida a este emblemático edificio reinosano, que presenta un lamentable estado de abandono y que en la entrada tiene una placa que indica que es Patrimonio Histórico de UGT.
Es una pieza más de arqueología de ese patrimonio contemporáneo del que puede presumir Reinosa, una ciudad carente de proyecto, sin museos y con algunos de sus edificios más notables que da pena verlos por fuera y por dentro. Un paisaje urbano que nos recuerda épocas mejores pero que también, mal que nos pese, nos mantiene en la realidad: una ciudad en lamentable declive.
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