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Deportes | Campoo de Enmedio

"Realmente no tengo propósitos en el deporte, simplemente quiero disfrutar y pasármelo bien"

Entrevista a Cristina Gutiérrez, atleta de la A.D. Triatlón Reinosa-Campoo, que ha conseguido alzarse con el Campeonato de Cantabria

Cristina Gutiérrez, la atleta de la A.D. Triatlón Reinosa-Campoo, logró el sábado de la pasada semana un segundo puesto en la categoría élite femenina del XXXI Triatlón Blanco, consiguiendo, de esta manera, ganar el Campeonato de Cantabria. Aunque no es el único deporte que ha practicado, la natural de Villaescusa nunca ha dejado de correr, "creo que no podría parar de entrenar, me encanta competir". Una realidad que se refleja en su palmarés, y es que en tan sólo cuatro años la campurriana ha logrado seis campeonatos nacionales, compitiendo en su categoría de edad, así como cuatro Copas de España, todas ellas en Triatlón de Invierno.

¿Cómo comenzó su trayectoria deportiva?

A los ocho años empecé a practicar atletismo en el Club 80 de Matamorosa, junto a otros atletas de la comarca como el campurriano Raúl Pérez Nestar. Cuando desapareció, en 1997, me inscribí en el Club Lupa, donde mejoré mis condiciones físicas con las indicaciones del entonces entrenador, Tito Carrera. De pequeña tenía facilidad para el deporte, lo que me permitió participar en campeonatos de España tanto en pista, como en campo a través, salto de longitud o velocidad. Hacía un poco de todo.

No es el único deporte que ha practicado.

Para nada, a los 17 años fui apartándome del atletismo para jugar al fútbol sala femenino. Con el conjunto, que también surgió de la iniciativa de Tito Carrera, conseguimos la segunda posición de la Liga Regional durante el primer año que competimos.

¿Qué circunstancia le impulsó a correr su primer prueba con sectores?

Hace nueve años, mi marido me animó a inscribirme junto él en la categoría individual del que fue mi primer duatlón. Sentí tanta satisfacción al terminar los tres sectores, que salvo para tener a mi hijo, nunca me he alejado de las carreras. Pero no fue hasta el 2015 cuando me preparé para competir en una competición del calibre del Triatlón Blanco.

Una disciplina en la que ha conseguido sus mayores logros.

Sí, fue exactamente en las pruebas de duatlón y triatlón de invierno del 2015 en la que conseguí proclamarme subcampeona nacional y continental de mi grupo de edad. Competiciones que como el resto, son a carrera única, es decir, no es necesario alcanzar una marca específica para ser admitida en ninguna de ellas. No es tan serio como otros deportes.

¿Nunca se ha propuesto competir en un triatlón de verano?

No, no se me da bien la natación, creo que sería incapaz de nadar la distancia estipulada.

El pasado 16 de febrero ha sido la segunda atleta en completar el Triatlón Blanco.

Esa afirmación no es del todo cierta, realmente quedé tercera. La segunda atleta en conseguir la mejor marca fue otra deportista, pero como no estaba federada no pudo optar al premio. La verdad es que lo hizo fantásticamente bien.

Una situación que no le imposibilitó convertirse en la mejor triatleta de Cantabria.

Sinceramente, quedar la primera de la región era mi único objetivo de la jornada, aunque unos meses antes ni lo sabía, y es que en un principio no tenía pensado participar en la competición campurriana.

¿Cómo la afrontó?

Estaba muy nerviosa, incluso varios días antes de la carrera. No había entrenado apenas, y las condiciones meteorológicas, aunque fueron muy propicias, nos hicieron dudar sobre la indumentaria que debíamos usar, no es habitual correr un triatlón de invierno en pantalón corto.

Por otro lado, la prueba de atletismo de la competición me pareció especialmente larga, ya desde el principio pronosticaba que se me iba a hacer eterna y así fue. Una situación que cambió favorablemente al montarme en la bicicleta, momento en el que comencé a creer que podría hacerlo bien, me veía con fuerza. Una resolución que se alargó hasta la segunda vuelta de la estación de esquí: al colocarme en tercera posición focalicé mis pensamientos en llegar a meta sin caerme.

¿Se siente orgullosa o con suerte?

Ambas, me da un poco vergüenza hablar con la gente del tema porque no he entrenado tanto como a lo mejor ha podido hacer otro participante, pero soy consciente de que hay que estar ahí, compitiendo contra todos los participantes.  

Aun así nunca ha dejado de entrenar.

No, pero son entrenamientos individuales bastante básicos. Cada semana me esfuerzo por compaginar el spinning con las carreras a pie, aunque este año, debido a la falta de tiempo, no me estoy implicando tanto. Aunque en algunas ocasiones la causa directa es el trabajo, he de admitir que en otras simplemente me apetece invertir dicho tiempo en asuntos alejados al deporte. Soy un poco perezosa, por lo que a veces me pongo disculpas a mí misma para evitar hacer ejercicios durante una jornada. En realidad, no puedo obviar que debo bastante a mi genética, con poco que haga rindo mucho más que alguien que le dedica más tiempo. 

¿Sigue una alimentación estricta?

No, creo que psicológicamente no podría. Me gusta comer e intento hacer comidas sanas en general, pero tengo un vicio oculto que son las gominolas, las como constantemente.

¿Cuáles son sus objetivos a corto plazo?

Realmente no tengo propósitos en el deporte, simplemente quiero disfrutar y pasármelo bien en las carreras, pero siempre me queda una duda: saber hasta donde podría llegar si entreno tanto como pueda. Cuando hacía atletismo sabía que podría conseguir grandes objetivos y de hecho los veía, pero nunca he podido dedicarme a ello tanto como debiera.

¿Qué le aporta el deporte?

Corriendo despejo mi cabeza saturada de cuestiones a resolver, empezando, de esta manera, otra vez el día aunque esté a punto de acabarse. Algo que también les sucede a aquellas personas de mí alrededor que están comprometidas con el mismo deporte que yo. Lo más divertido es entrenar en grupo y mejorar con gente para ponerte objetivos superiores en cada carrera.

¿Alguna vez se ha planteado dejarlo?

Yo creo que no podría, me cuesta entrenar, soy perezosa, pero me encanta competir, aun así soy consciente de que nunca me pondría al extremo, ya lo pasamos demasiado mal cada día como para sufrir al límite.