La concentración parcelaria es el procedimiento por el que se agrupan diversas fincas de reducido tamaño, unificándolas en fincas más grandes, de forma que se garantice la viabilidad técnica y económica de su cultivo. Su finalidad es situar las nuevas fincas en el lugar que mejor pueda atenderlas quien las explote, dotándolas de acceso a las vías de comunicación, modificando y creando caminos.
En el caso de Campoo de Enmedio, este complejo proyecto ya fue aprobado por el Consejo de Gobierno en el año 2003, aunque su inicio se remonta a 1991. El mismo ha sido retomado recientemente por el Ayuntamiento, a través de su alcalde, Pedro Manuel Martínez, y promovido por la Consejería de Desarrollo Rural.
Durante varias legislaturas las promesas de los consejeros de Ganadería, los regionalistas José Álvarez Gancedo y Jesús Oria, no se cumplieron, haciendo caso omiso a las reivindicaciones encabezadas sobre todo, por los entonces concejales del PRC en Campoo de Enmedio, Bernardo Longo, Mirella Martínez y, previamente, Carlos Linares, incumpliendo todos los compromisos, incluso el acuerdo del Consejo de Gobierno de 2003 en el que se aprobó una inversión de más de 3 millones de euros, dando así el visto bueno a la concentración parcelaria de este municipio campurriano. Unos años más tarde, la Consejería de Desarrollo Rural decide congelar este proyecto para "dar salida a otras concentraciones parcelarias más sencillas y asequibles".
Hace unos días el Ayuntamiento ha publicado un Bando, anunciando que por motivo de las gestiones que se están llevando a cabo relativas al proyecto de Concentración Parcelaria promovido por la Consejería de Desarrollo Rural Ganadería Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria, se pone en conocimiento de todos los interesados, que, mediante cita previa, serán atendidos en el Consistorio a partir del día 15, de este mes de febrero. Las actualizaciones de titularidades y otras gestiones serán llevadas a cabo por parte de los técnicos de la Consejería.
Se ordenarán unas 3.500 hectáreas
Según los datos que la propia Consejería publicó tras el acuerdo de Gobierno hace veintiún años, las 7.000 parcelas existentes en el municipio se convertirán en 2.500, urbanizadas por 54 kilómetros de caminos rurales. La superficie parcelaria es de 3.500 hectáreas, con un número de propietarios superior a los doscientos. La extensión media de las parcelas pasaría de las 0,25, a las 0,70 hectáreas.