La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación ha detectado un cuarto caso de gripe aviar en Cantabria, concretamente en el municipio de Villaescusa, que se suma a los tres anteriores registrados en Castro Urdiales, Laredo y Santoña.
Se trata de un charrán común, ha explicado la consejera, María Jesús Susinos, que ha precisado que los cuatro casos detectados en Cantabria hasta la fecha, se corresponden con aves silvestres, aclarando que en Cantabria no se ha detectado ningún caso en aves domésticas.
La consejera ha recordado que desde el primer caso de gripe aviar detectado en Cantabria el 29 de septiembre en una gaviota localizada en Castro Urdiales, su departamento puso en marcha medidas preventivas no autorizando concentraciones o exposiciones con presencia de aves.
Los siguientes casos, ha indicado, se detectaron el 17 de octubre en Laredo y Santoña también en aves silvestres (gaviotas).
Susinos también se ha referido a la orden publicada hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE) por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que ordena el confinamiento de las aves de corral que se crían al aire libre en todos los municipios de España y que, lógicamente, afecta a los 102 municipios de Cantabria, como medida preventiva y de control del contagio por gripe aviar.
Un confinamiento que el Ministerio ha vinculado al movimiento de las aves migratorias y cuya extensión ha previsto hasta el próximo mes de marzo.
Por este motivo, ha hecho un llamamiento "a la responsabilidad" de todas aquellas personas que tengan aves de corral en su casa para cumplir el confinamiento previsto en la orden del Ministerio.
Además, ha considerado "fundamental" que estas aves de corral no tengan contacto directo con aves silvestres y tengan protegidos los comederos y bebederos.











