La mayoría no habían jugado antes y las que lo habían hecho nunca habían tenido la posibilidad de federarse. La iniciativa del CD Naval de formar el primer equipo femenino de fútbol de la ciudad ha sido todo un éxito de participación y de público en la gradas, y lo que comenzó como una experiencia para practicar un deporte, se ha convertido en un compromiso de entrenador y jugadoras para situar a las navalistas entre los mejores equipos cántabros de fútbol femenino de la categoría Regional Preferente.
Este sábado, a las 18.30, disputan en casa un partido clave contra el Ampuero FC, su rival directo para luchar por ese cuarto puesto. Después de 10 jornadas, el equipo ocupa la quinta plaza, con diez puntos y 37 goles a favor por 27 en contra, y una victoria frente a las cuartas de la tabla permitiría a las reinosanas superarlas y tener todas las facilidades para disputar la Copa Oro. Una oportunidad para alargar la temporada y seguir ofreciendo en el Campo San Francisco de Reinosa su fútbol lleno de entrega.
El equipo está dirigido por Toño Blázquez, con una dilatada experiencia como entrenador de fútbol base, y que reúne a las jugadoras todos los miércoles y viernes para ejercitarse y preparar los partidos. Resalta la "ilusión" reinante por ser algo novedoso y tratarse del primer año. En este sentido, se enorgullece de "la entrega y la garra" de sus jugadoras en el campo, y es que una de las principales virtudes de este equipo es su sólida defensa, una de las que menos tantos ha encajado de la liga.
Las edades de las futbolistas abarcan desde los 14 años de jugadoras como Celia de Celis (la más joven), Ángela Álvarez, Nelly Pérez o Jordan Saiz, hasta los 40 de la más veterana, Merche Cardaba.
En el centro de la zaga juega Eva Hoyos (30 años), apodada cariñosamente por sus compañeras ‘Murito'. Eva no había jugado antes al fútbol porque no había ningún equipo femenino y vio en esta iniciativa una ocasión perfecta para iniciarse en un deporte que siempre le llamó la atención. Laura Ruiz (17 años) tampoco lo había practicado antes, su posición es la de extremo, y esta curiosidad por jugar al fútbol la hizo recalar en el equipo reinosano.
Entre la defensa y el centro del campo juegan Andrea García y Lidia Vallejo, más curtidas en este deporte que algunas de sus compañeras, y en la punta de ataque la magia la ponen tres jugadoras sudamericanas. Dos de ellas del país donde el balompié es una religión; las brasileñas Katia Lima (34 años) y Fátima De Sousa, acompañadas por la paraguaya Adela Servín (30 años) que ya había jugado al fútbol en su tierra natal, pero más acostumbrada a hacerlo descalza y en arena, precisa.
Para completar el grupo, el equipo femenino cuenta también con las jugadoras Rocío López, a quien el fútbol le viene de serie en el apellido, Lucía Herrero, Johanna Calderón, Tania Saiz o María Martínez.
Fútbol en femenino
Por su parte, Miguel Ángel Fernández Higuera, directivo del club, explica que todo comenzó con una proposición por parte de la presidenta del Reocín, Anto Verdugo, mujer del presidente de la Federación Cántabra de Fútbol , José Ángel Peláez, para probar suerte con un equipo femenino y crear una liga a nivel regional, dado el arraigo del fútbol en Campoo y la cantidad de equipos que hay en categoría base dentro de la comarca.
Una vez anunciada la creación de este equipo antes del verano, la incertidumbre inicial resultó tener "una acogida estupenda", y la motivación de las jugadoras ha permitido crecer un poco más a un Naval más paritario, esta vez sentando precedente con el primer equipo femenino en la historia.
Un grupo de 16 jugadoras, más algún fichaje de última hora, en el que impera el buen ambiente y el compañerismo en esta nueva etapa, donde la diferencia de edad une más que separa a las futbolistas dentro del vestuario. Una ilusión que se ha trasladado a la grada y que reúne más aficionados que cualquier partido de fútbol base disputado en Reinosa.