La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Comisiones Obreras en Cantabria (CCOO) ha lamentado este miércoles que "todo sigue igual" en la sanidad de Cantabria, y que "una asistencia sanitaria que debería ser pública, universal y en igualdad para todos y todas, independientemente de su lugar de residencia, continúa a la deriva y sin un rumbo claro y definido por parte de sus actuales responsables".
La Federación ha enviado este mensaje tras constatar que el último fin de semana, coincidiendo además con el puente de Todos los Santos, donde se incrementa de forma considerable la población en la región con el turismo, los centros de salud de Meruelo, Sarón, Reinosa, Laredo y Ontaneda no han tenido personal facultativo en el Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), es decir, que no ha habido personal médico para cubrir las urgencias en esas localidades.
"La cuestión es alarmante desde hace varios meses, y desde CCOO lo venimos denunciando. Hemos hecho cálculos y desde el pasado 28 de junio hemos contabilizado que ha faltado personal facultativo en los SUAP de diferentes municipios de la región en, al menos, cincuenta ocasiones. No se trata de una cifra baladí o de un número sin más sino que detrás de él están miles de cántabros y cántabras que no han podido tener acceso al servicio sanitario de urgencia que les corresponde y que constituye un derecho fundamental en nuestra sociedad", ha declarado Arantxa Cossío, secretaria general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO en Cantabria.
La federación ha insistido en que llevan meses alertando sobre la situación que atraviesa la sanidad pública en nuestra comunidad y en las deficiencias de una gestión que no sólo afecta al personal del servicio de urgencias sino que también ha provocado el cierre de consultorios rurales y unas listas de espera desmesuradas para realizar cualquier prueba u operación, entre otras cuestiones.
"Se trata de un problema que afecta a toda Cantabria y que además está poniendo a los y las profesionales de la sanidad en la cuerda floja: las cargas de trabajo continúan en aumento, la presión asistencial es cada vez mayor y tanto sus condiciones laborales como su salud se está deteriorando. Nuestra preocupación sigue en aumento y por eso tenemos que salir a las calles de Reinosa el próximo sábado, 9 de noviembre, a denunciar la situación. Es la primera parada pero, de seguir así las cosas, continuaremos movilizándonos a lo largo y ancho de la geografía regional. Campoo en particular pero Cantabria en general tiene que echarse a las calles de Reinosa el sábado a partir de las 12.00 horas, para reivindicar un cambio de rumbo en la gestión sanitaria de nuestra comunidad autónoma", ha clamado Cossío.
CCOO no es ajena a la situación, está implicada en su resolución y ya ha comenzado a tomar medidas. Así, ha puesto en marcha una campaña de recogida de firmas bajo el título ‘Salva la sanidad de Cantabria', donde quiere aunar el sentimiento de profesionales de la sanidad y de ciudadanía porque la indignación continúa escalando y la Consejería de Salud no está poniendo los medios y recursos necesarios para solucionar el caos.
Además, va a iniciar una ronda de contacto con las formaciones políticas de la región para compartir el análisis de la situación y establecer propuestas de acción que sirvan para poner fin a la deriva de la sanidad en Cantabria. Del mismo modo, van a contactar con asociaciones de vecinos, organizaciones profesionales, entidades sociales y, en definitiva, con la sociedad civil organizada, para trasladarle los riesgos y deficiencias sanitarias que está sufriendo la población.