Sin fechas concretas, lo harán progresivamente y tanto el destino de los padres como el futuro uso del convento no están aún definidos
No han decidido su cierre
Los hermanos de la Orden de los Carmelitas Descalzos, radicada en Reinosa desde hace casi ochenta años, abandonarán progresivamente la ciudad por la falta de vocaciones actuales y por la necesidad de una restructuración general de la compañía a nivel nacional.
Así se lo han comunicado esta mañana a Vive Campoo fuentes del Carmelo, que se mostraron cautas, y que tampoco emplearon la palabra "cierre", como una medida definitiva. Asimismo, indicaron que la salida de los hermanos que actualmente residen en el convento no tiene una fecha definida, pero que se irá realizando progresivamente durante los siguientes meses.
En cuanto a la futura actividad del Convento, no negaron la posibilidad para continuar con algún uso de la orden y tampoco descartaron que en un futuro, si la situación cambia, se vuelve a retomar la actividad actual.
Por otra parte, según ha podido saber Vive Campoo, la decisión no obedece a causas económicas, sino a la falta de vocaciones actuales (a nivel nacional cuentan con tan solo un novicio y un postulante y son quince los carmelitas menores de 50 años). La comunicación se ha trasladado estos días, en el consejo celebrado entre cuatro padres y el superior Provincial, radicado en Burgos, que es de donde depende la orden campurriana.
Una decisión difícil, dada la ligazón de la Orden en Cantabria, como han reconocido desde la Compañía, pero para la que no había muchas opciones: dejar morir cada convento por su cuenta o restructurar y aglutinar a los frailes en un número menor de centros, para que el Carmelo tenga continuidad en España.