La Asociación para la Defensa de los Recursos Naturales de Cantabria (ARCA) ha criticado este lunes al Ayuntamiento de Reinosa por la tala de fresnos centenarios en el parque de Las Fuentes de la capital campurriana y alerta de "posibles casos similares" en Cantabria "aprovechando la crisis del coronavirus".
Así lo ha hecho publico la organización ecologista en un comunicado y se remiten a los escritos enviados al Consistorio y a la Administración regional, en los que "ARCA denuncia y reprueba la tala que el Ayuntamiento de Reinosa he hecho de dos fresnos de gran porte, uno de ellos de más de 150 años, en el mejor parque forestal de la villa, conocido como Parque de Las Fuentes". Una tala que desde la asociación sostienen que "se ha llevado a cabo en abril, aprovechando precisamente el estado de alarma durante la crisis del COVID-19".
Para ARCA, "con esta tala de árboles monumentales y longevos como atestiguan sus anillos, se han eliminado unos de los mejores árboles de la ciudad: lo que constituye una agresión al medio ambiente, al paisaje, a la salud y al patrimonio, por parte de la autoridad municipal que precisamente debiera de ser la más responsable e interesada en conservarlos".
En una época donde la sensibilidad social hacia el medio ambiente, y la importancia del arbolado en general y muy especialmente en entornos urbanos va en aumento, afirman desde ARCA, "el Ayuntamiento de Reinosa, con esta tala, muestra su falta de aprecio al papel fundamental que desempeñan los árboles en el medio urbano para la calidad de vida, el paisaje, la tradición y la cultura de Cantabria".
ARCA prosigue en la misma línea crítica y considera "chocante" que en una época en la que "muchos responsables políticos regionales reiteran expresiones como calentamiento global, sostenibilidad, biodiversidad, "a España verde, etc...,la respuesta concreta y cotidiana de algunos municipios sea totalmente ajena y frontalmente contradictoria, aplicándose con celo a destruir el arbolado de gran porte". Una actitud que, desde su punto de vista "les sitúa al margen de la sensibilidad social, demostrando no estar a la altura de las respuestas que la época actual requiere y la ciudadanía espera".
Por otra parte, desde la asoción matizan que "no se pone en duda que en casos muy concretos y puntuales pudiese resultar imprescindible la supresión de algún ejemplar arbóreo", pero desde su punto de vista "lo que parece estar sucediendo, es la aplicación del criterio de desconsideración general hacia los árboles y devaluación de los mismos, al relegar su conservación al último lugar de prioridades".
