El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Luis Martínez Abad, ha visitado este lunes la Estación de Esquí y Montaña Alto Campoo con motivo de la recepción de la segunda máquina pisapistas adquirida este último año en la instalación.
Con la llegada de esta segunda máquina, cuyo coste ha ascendido a 654.000 euros, la dotación de la estación cántabra se ve aumentada a cinco pisapistas.
El principal objetivo de la inversión, 1,3 millones por las dos nuevas máquinas, es mejorar la calidad y el ritmo de preparación de pistas y dar mayor seguridad tanto a trabajadores como a los usuarios. La primera pisapistas ya funcionó en la temporada pasada.
Ambas corresponden al modelo PistenBully de la marca alemana Kassbohrer, que en España se distribuye a través de Casli, y cuentan con tecnología punta al llevar incorporado el sistema SNOWSat. Este sistema utiliza los datos del GPS para generar una imagen cartográfica de las pistas y transferirla a la cabina para que el conductor conozca en tiempo real la profundidad de la nieve o los puntos y pistas que requieren más nieve o pisado de la misma.
"Estamos haciendo una apuesta importante por la estación de Alto Campoo, por renovarla, por impulsarla y seguimos en esta línea de trabajo que emprendimos ya hace dos años", ha afirmado el consejero, quien ha estado acompañado de Inés Mier, la directora general de Cantur, empresa pública que gestiona la estación, y de la directora de Alto Campoo, Cristina López.
La responsable de la estación ha señalado que con la incorporación de las dos últimas máquinas pisapistas Alto Campoo también gana en "autonomía".
"Vamos a tener muchísima más eficiencia a la hora de desarrollar los trabajos durante el invierno", ha explicado Cristina López, quien ha matizado que contar con una flota de cinco máquinas "nos permitirá mantener el buen estado de las pistas, en caso de posibles roturas o averías de las máquinas más antiguas".