Guardia Civil y Policía Nacional advierten a la ciudadanía sobre los delitos relacionados con el método conocido como "abrazo cariñoso"
Las víctimas son generalmente personas mayores del medio rural
En los últimos meses, y con especial intensidad en esta época estival, tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional están constatando un aumento de hechos delictivos relacionados con el conocido popularmente como "abrazo cariñoso", consistentes en la comisión de delitos de hurto al descuido en los que las víctimas son generalmente personas de avanzada edad.
Estos hechos están siendo protagonizados por ciudadanos extranjeros, generalmente de origen rumano, que viajan en grupo (normalmente, dos hombres y dos mujeres, o bien un hombre y una o dos mujeres, y en algunos casos acompañados por niños) y en vehículos con placas de matrícula nacional o extranjera, que se desplazan con gran rapidez y movilidad por los pueblos de la provincia, desapareciendo y trasladándose en un breve espacio de tiempo a otras provincias y comunidades, en muchos casos a grandes distancias, con el objeto de dificultar su detención.
Modus operandi
El modus operandi de estos grupos de delincuentes es localizar a sus potenciales víctimas fundamentalmente en el medio rural, en localidades donde abundan las personas mayores, a los que abordan, bien en la calle, bien en sus propios domicilios, solicitando firmas para apoyar alguna causa benéfica o relacionada con alguna enfermedad, o preguntándoles por la dirección de un centro hospitalario, una farmacia, etc. Acto seguido, y fingiendo agradecimiento por la información recibida, la mujer abraza o intenta besar a su víctima, entregándole un anillo o un colgante sin valor alguno. Es el momento que aprovechan, con gran habilidad, para arrebatar a la víctima los collares, pulseras, anillos, relojes, o cualquier otro objeto de valor que lleve a la vista.
En caso de que los delincuentes no consigan su objetivo porque sus víctimas estén alerta y no permitan el acercamiento, o duden de sus intenciones, es posible incluso de que aquellos utilicen la violencia, la fuerza bruta, o las amenazas, para conseguir su objetivo, huyendo rápidamente a continuación.
En muchos casos, las víctimas no se percatan de que han sido robados hasta pasado un tiempo, incluso horas, tiempo suficiente para que los delincuentes abandonen el lugar de los hechos y se encuentren a muchos kilómetros de distancia, seguramente repitiendo sus "fechorías" en otro lugar en cualquier provincia limítrofe o de cualquier otra Comunidad Autónoma.
Desconfiar de las personas desconocidas
Por todo ello, y corriendo el riesgo de resultar repetitivos, tanto desde la Comandancia de la Guardia Civil como desde la Comisaría Provincial de Policía, se recomienda una vez más a los ciudadanos, sobre todo a las personas mayores, y a sus familiares, que desconfíen de todas aquellas personas desconocidas que se acerquen a ellos con intenciones poco claras y que se salen de lo que debemos entender por un comportamiento habitual o normal.
También es importante que estas personas mayores procuren ir siempre acompañados y no deambular, o pasear, sobre todo en el medio rural, por lugares aislados y solitarios, poco alumbrados, despoblados, o alejados de los núcleos de población.
También se aconseja a estas personas, si se camina por una carretera, hacerlo en sentido opuesto a la marcha de los vehículos y por la parte inferior de la acera.
Colaboración ciudadana
La Guardia Civil y la Policía Nacional solicitan la colaboración ciudadana para acabar con estas actuaciones delictivas y detener a los autores de las mismas. En este sentido, se aconseja avisar inmediatamente a los teléfonos 062 ó 091 cuando se observe la presencia de alguna persona o grupo de personas o vehículos en actitud sospechosa.
