Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.
Puede obtener más información, en nuestra Política de Cookies.

Una historia regada con harina

UN CORREDOR HARINERO

El centro de visitantes El Camino de las harinas, dependiente del CIMA (Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente), está situado en el edificio de un molino harinero emblemático, como es 'La Montañesa', y, a través de maquinarias e instalaciones originales, imágenes, audiovisuales e información precisa, el visitante podrá realizar un recorrido visual del corredor del Besaya desde épocas remotas hasta la autovía del siglo XXI, conociendo la memoria de aquellos tiempos.

A lo largo de más de un siglo, desde finales del siglo XVIII, las aguas del Besaya molieron cantidades formidables -un río- de harina procedente de Castilla y con destino al puerto de Santander, al que llegaban en carros y vagones ferroviarios por varios caminos del valle. Éste pasó a convertirse así en un corredor industrial que prolongaba hacia el Norte el rosario de harineras asentado sobre el Canal de Castilla.

A finales del siglo XIX, con el inicio de su decadencia, muchas de las obras hidráulicas de esas fábricas de harinas servirán de base energética a un nuevo ciclo de industrialización ya no asentada en la molienda, que hará del Besaya uno de los espacios fabriles más caracterizados de la Cantabria contemporánea.
Información y reservas: 900 469 009

Si lo deseas puedes patrocinar esta galería

Patrocinar galería Una historia regada con harina