El consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, ha clausurado hoy la escuela taller de Reinosa con la entrega del diploma acreditativo a 30 jóvenes que se han formado durante un año gracias a este proyecto al que el Gobierno cántabro ha destinado 324.293 euros, cofinanciados al 91,89% por el Fondo Social Europeo.
Acompañado por el alcalde, José Miguel Barrio, y el director del Servicio Cántabro de Empleo (EMCAN), José Manuel Callejo, entre otros, el consejero ha destacado la apuesta del Gobierno por las medidas que facilitan la formación y el reciclaje profesional para que los jóvenes desempleados puedan encontrar un puesto de trabajo y ha recalcado que "a mayor formación, mejor empleo".
El regidor municipal ha recordado los inicios de la Escuela taller en la ciudad en el año 85, calificando este programa proyectado e inventado por el arquitecto José María Pérez 'Peridis' como "brillante".
En su opinión, "fue un gran acierto" que ha permitido poner en marcha políticas activas de empleo que facilitan la consecución de un puesto de trabajo "a través de una buena formación" y que es "la antesala de un empleo digno". En este sentido, ha destacado el esfuerzo que vienen realizando en este sentido tanto el Gobierno de Cantabria como el Ayuntamiento de Reinosa, poniendo a disposición de los alumnos los diferentes recursos y programas promovidos por ambas instituciones para "apoyar y mejorar su formación".
En el acto de clausura han estado presentes también los concejales Tomás Gutiérrez, Sergio Balbontín, Miguel Ángel Fernández y Daniel Santos. La aportación municipal ha sido de 77.481 euros.
La iniciativa, desarrollada en colaboración con el Ayuntamiento de Reinosa, ha servido para que los seleccionados hayan recibido formación en alternancia con el empleo, cursando dos certificados de profesionalidad, uno en ‘Operaciones auxiliares de montaje de redes eléctricas' y dos de ‘Atención sociosanitaria a personas en domicilios', con 15 alumnos en cada uno de los títulos.
De la cantidad total invertida, 32.400 euros se han destinado al pago de becas durante los seis primeros meses y 110.165 euros a salarios y Seguridad Social, ya que en la segunda fase del proyecto los participantes han sido empleados por el Ayuntamiento con un contrato de formación y el aprendizaje.
En la primera de las titulaciones, los alumnos y alumnas han obtenido una cualificación que les capacita para montar y mantener instalaciones eléctricas de baja tensión en edificios destinados principalmente a viviendas, locales comerciales, de oficinas o industrias o para el montaje, así como de instalaciones de automatismos y máquinas eléctricas.
En el segundo de los casos, la cualificación les permite desarrollar actividades en una actividad que, según ha señalado el consejero, esta "al alza" en el cuidado a personas mayores con especiales necesidades en salud física, psíquica y social con procedimientos que sean adecuados para mantener y mejorar su autonomía personas y relaciones con el entorno.
Sota ha resaltado que esta escuela taller ha facilitado, en ambos casos, un nivel de cualificación que es equiparable a un título de formación profesional de grado medio y, de forma transversal, los participantes han añadido más tiempo a clases sobre nuevas tecnologías, emprendimiento o cómo buscar de forma activa un empleo.
