El centro integral de atención al mayor que la Fundación Santa María la Real gestiona en Aguilar de Campo se ha llenado hoy de colorido y alegría con la presencia de alumnos de 4º de Primaria del Colegio San Gregorio.
Acompañados por sus tutores han compartido una hora de risas, trabajo y juegos con los mayores de Tercera Actividad, con motivo de la celebración del aniversario del centro. "Actividades de este tipo contribuyen a dar vida y alegría a los abuelos", comenta la directora Marimar Espartero, para añadir que, además "sirven para fomentar su autonomía y su relación con el entorno".
En esta ocasión, entre todos, abuelos, jóvenes y trabajadores se han ocupado, en primer lugar, de sembrar plantas para dar colorido al jardín-huerto. Petunias, pensamientos y dientes de dragón se han ido intercalando en las jardineras, entre risas y constantes preguntas sobre cómo trasplantar, plantar o cómo y cuánto regar. Una visita al invernadero para conocer las hortalizas que allí se cultivan ha servido para cerrar esta primera parte del intercambio.
Las flores han dado paso a los juegos tradicionales. Los jóvenes del colegio han podido jugar a los bolos, a la peonza o a la comba, ante la atenta mirada de los abuelos, que, sin duda, entre chascarrillos e instrucciones, han rememorado sus recuerdos de infancia.
Como recuerdo y agradecimiento por el rato compartido los abuelos han obsequiado a los más jóvenes con una flor y con un detalle realizado durante la semana en el taller de manualidades.
