La consejera de Sanidad, María Luisa Real, ha agradecido personalmente al secretario general de la Asociación Hermandad de Donantes de Sangre, Javier Gandarillas, sus cuarenta y cinco años de trabajo y dedicación, como secretario general, a la Asociación Hermandad de Donantes de Sangre de Cantabria.
Han sido nueve lustros tras los cuales, a finales del próximo mes de septiembre, pasará a disfrutar de un merecido descanso. En este tiempo, Gandarillas ha sido testigo de primer orden del nacimiento de la Hermandad en nuestra comunidad autónoma y de sus difíciles inicios pero también de su evolución y de los éxitos que han situado a Cantabria entre las comunidades con mayor número de donaciones. Nada menos que 93.000 personas han donado sangre en algún momento de su vida durante esos años.
Con memoria envidiable, el que desde entonces ha sido su secretario general, no sólo recuerda la fecha de creación de la Hermandad de Donantes de Sangre, el 22 de julio de 1970, sino los primeros pasos en la captación de donantes, en las habitaciones del Hospital Valdecilla y a base de explicaciones y peticiones a los familiares de los enfermos ingresados que, por aquel entonces, se prestaban a ello generosamente pero no sin cierta extrañeza ante la novedad.
Hasta entonces, la obtención de un elemento tan preciado como insustituible a día de hoy, no se basaba en la donación altruista sino en la compra, sin los controles exhaustivos que se hacen en la actualidad, de quienes estaban dispuestos a obtener una remuneración a cambio de su sangre.
A base de tiempo y trabajo, Cantabria logró situarse y mantenerse en los primeros puestos de donaciones altruistas de sangre, llegando a contabilizar el último año de 2015 más de 22.400 donaciones y la incorporación de 2.253 nuevos donantes, un alto porcentaje de los cuales son jóvenes de entre 18 y 30 años. La Hermandad ha sabido incorporar a sus objetivos las nuevas tecnologías y, así, la informática y las redes sociales han sido incorporadas al cumplimiento de sus objetivos.
Todo ello ha sido valorado por la consejera de Sanidad, quien ha agradecido a Gandarillas su dedicación y el haber sido la "cara visible", a lo largo del tiempo, de la "generosidad de los cántabros"y de los muchos éxitos logrados, el más importante de los cuales ha sido el conseguir que Cantabria, con un hospital de referencia de la categoría de Valdecilla, sea "autosuficiente"en el abastecimiento de sangre.
María Luisa Real ha deseado a Javier Gandarillas que la nueva etapa que pronto dará comienzo para él, le resulte tan grata y llena de éxitos personales como lo ha sido su larga dedicación a la Asociación Hermandad de Donantes de Sangre.
