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Cultura | Reinosa

Una poesía cada día

Una poesía cada día

Foto: Marcos Díez.

La obra de Lorenzo Oliván y los cuentos en verso de Roald Dahl para esta semana

La poesía de Lorenzo Oliván: Puntos de fuga, Libro de los elementos, Nocturno casi

La poesía en Cantabria ha experimentado en los últimos 30 años un gran crecimiento, tanto si tenemos en cuenta los libros publicados, como si pasamos revista a los poetas de nuestra tierra. Entre todos ellos hoy queremos destacar a Lorenzo Oliván (Castro Urdiales, 1968), autor de varios libros de poemas que han merecido los más importantes premios del género y que acaba de publicar un nuevo poemario, en una de las colecciones más reconocidas, entre las que se dedican a editar poesía, de España, nos referimos a Nuevos Textos Sagrados de Tusquets. Oliván ha sido reconocido con el XIII Premio Internacional de Poesía Fundación Loewe por Puntos de fuga y el VI Premio Internacional de Poesía Generación del 27 por el Libro de los elementos. En estos dos y su reciente trabajo, Nocturno casi, nos basaremos para acercarnos y tratar de comprender el universo simbólico de este escritor, que, desde sus versos, nos acerca su sensibilidad que penetra en todos y cada uno de los rincones del alma del lector y le hace cómplice de sus certezas, de la trascendencia de la vida, de su percepción de lo inaprensible, de sus titubeos y sus inseguridades, tal y como llega a escribir en Puntos de fuga: La realidad es una dura tierra / donde no crecería algo tan leve [...] o Nunca mires las cosas / tan sólo con tus ojos [...] La más común ceguera de este mundo / es ver tan sólo lo que todos ven.

Lorenzo Oliván ha ido depurando su lenguaje y expresión desde un simbolismo esencial hasta la hondura metafísica que caracteriza su último trabajo, Nocturno casi. El poeta se nutre del intelecto, de la racionalidad y de la música pero también del sentimiento y las emociones que son propias del acto poético. Encontramos en sus frases parajes ocultos en nuestra memoria o palabras certeras que despiertan sensaciones olvidadas, como en Lluvia de ciudad, de Libro de los elementos: La lluvia te regresa a algún principio. Es en este principio donde la poesía adquiere verdadera significación, explicar la vida y el mundo: Que la vida me quite a mí la vida / sin primero quitarme / lo mejor que me dio.

La poesía tiene el extraño efecto de hacernos ver, de obligar a nuestra imaginación a traspasar los límites de lo cotidiano para acercarnos a la reflexión, de hacernos sentir que todo lo que nos rodea pueda ser simplemente un espejismo: No existe el horizonte que ahora ves, / es sólo una ficción que el ojo crea [...]. Sus poemas se asientan sobre las preguntas y las dudas que la vida plantea: Quizá el azar se burle / de mi absurda creencia en el destino (del último libro Nocturno casi).

Leer poesía es un acto que nos ayuda a buscar en lo más hondo de nuestro yo, donde nos encontramos con las grandes preguntas y la esencia del ser humano. La poesía es evocadora de impresiones, de retazos de vida olvidados, Lorenzo Oliván en sus poemas intenta coser esas costuras rotas que guardan los sentimientos.
La vida ofrece a veces un único camino,
el que precisamente queríamos tomar. [...]

 

'Cuentos en verso para niños perversos' (Infantil).

«El animal mejor que yo recuerdo / es, con mucho y sin duda alguna, el cerdo.
El cerdo es bestia lista, es bestia amable, / es bestia noble, hermosa y agradable.
Mas, como en toda regla hay excepción, / también hay algún cerdo tontorrón.
Dígame usted si no: ¿qué pensaría / si, paseando por el Bosque un día,
topara con un cerdo que trabaja / haciéndose una gran casa... de PAJA?»

En este libro, Roald Dahl, ofrece una divertida versión de los cuentos clásicos infantiles en la que una Cenicienta muy peculiar rechaza al príncipe y se casa con un señor que «hacía mermelada», la habichuela mágica era en realidad una planta gigantesca sí, pero toda de oro, Blancanieves hace autostop para salir del bosque y termina convertida en ama de llaves de siete hombrecillos muy simpáticos, los tres osos se quieren comer a Ricitos de Oro y Caperucita Roja se hace un abrigo con la piel del lobo y con la de los tres cerditos...

El autor consigue provocar la risa en los lectores, por medio de bromas simpáticas, exageraciones y disparates. Utiliza su sentido del humor y su magia para entretener a los niños. Por otra parte, las ilustraciones acompañan los argumentos de los cuentos y ofrecen una mirada divertida sobre las peripecias que suceden a los personajes.

CUENTOS EN VERSO PARA NIÑOS PERVERSOS
Autor: Roald Dahl
Ilustrador: Quentin Blake
Alfaguara, 2002
ISBN 84-204-4333-6
Para niños de 7 a 9 años