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Educación | Reinosa

Oscar Serna, ofrecer una educación de experiencias

El director explica los proyectos para este curso en su segundo año al frente del colegio San José de Reinosa

Es su segundo año como director del colegio San José y el relevo que cogió el año pasado se ha transformado en la actualidad en un proyecto propio de futuro. Sin dar la espalda a los conceptos académicos de la educación, concede un papel fundamental al bilingüismo, la innovación y las nuevas tecnologías. Apuesta por la importancia que tiene en los alumnos la generación de ideas y vivir experiencias más allá de las clases ordinarias.

Oscar Serna es el primer director laico en los más de 100 años del centro y confiesa que "hay gente que todavía tiene una imagen carca y desfasada del San José". No tiene la sensación de haberse ido de vacaciones y como estudiante responsable le gustaría dejar cerrado en junio el curso del año siguiente.

Para 2014-15 el colegio San-José Niño Jesús de Reinosa tiene más de 500 alumnos matriculados. Una ligera disminución marcada por la tendencia demográfica, "salen más alumnos de los que entran", aclara el director. Son sesenta trabajadores incluyendo al profesorado, administración, servicios y los cuatro hermanos menesianos que hay en la actualidad en el centro.

Serna acaba de volver entusiasmado de la Feria Simo 2014, un foro en el que se presentan las nuevas tecnologías aplicables a la educación. Menciona a varios "gurús" de su gremio, habla de aplicaciones móviles, de programación de videojuegos, del feedback con los auxiliares de conversación que tienen en clases de idiomas, de los cursos de verano en el extranjero y de lo beneficiosas que resultan las actividades extraescolares.

"Mi apuesta personal es estar donde se cuecen las tendencias educativas de los próximos 20 años". Vuelve convencido de la importancia que tiene para el futuro de la educación lo que ha visto en Madrid y asegura que las apuestas educativas para este curso "son las de siempre", potenciar el bilingüismo, la innovación, el uso de las nuevas tecnologías y todo ello fomentando el emprendimiento, el liderazgo y la creatividad del alumno.

El valor añadido de las ideas.

El director tiene claro el papel del inglés en el centro, "quiero perfeccionarlo para estar al orden del día de todo lo que pasa en educación, ya sea a través de páginas web o en los encuentros y foros que se celebran e intentamos acudir; es la lengua que se habla en los sectores punteros". También aplicar la receta del benchmarking, "ver cómo se trabaja en los diferentes sitios donde algo funciona y tomar nota".

Sobre la necesidad de la innovación en educación, argumenta que "los alumnos de hoy se aburren con las clases de antes, y tenemos que buscar nuevas metodologías y fórmulas para que sean más amenas".
A su juicio, "ahora se demanda generar ideas, un valor añadido muy importante que solo pueden ofrecer las personas". Aun así, reconoce que es un proceso lento y que se necesita una serie de años para medir los resultados pero asegura que trabajan en esta línea.

Del relevo al proyecto propio.

Hace un balance de su primer curso como director y confiesa que "este año es totalmente diferente, el curso pasado viví muchas situaciones que tuve que gestionar de golpe, y tal vez me hayan permitido ganar agilidad para tomar decisiones". Oscar Serna predica con el ejemplo y acaba de cursar un máster de dirección y gestión de centros que le ha valido para continuar con su formación de director.

"Ahora igual ya no me pongo nervioso con casos similares. Quizá yo no lo perciba pero algunos compañeros me han comentado que trasmito serenidad cuando tomo decisiones".

Se considera una persona optimista y, a pesar de que no corren buenos tiempos, cree que "el colegio está dando pasos hacia adelante". Hacia la meta que él se plantea.

Y es que, como el mismo reconoce, "el año pasado cogía un relevo y ahora soy más consciente del proyecto y de lo que debemos ofrecer a los alumnos; todo lo que esté en nuestras manos para que sean buenas personas, personas capaces y que sean personas que mejoren el mundo".

Desde su punto de vista "la gran diferencia está en educar a todos, y esa diferencia la marca el maestro con un perfil competente, y aquí hacemos una apuesta muy fuerte por la formación de nuestros docentes", subraya.

"Buenas personas, capaces y que mejoren el mundo".

Preguntado por cuál sería su satisfacción al concluir el presente año lectivo responde que "vendrá en junio cuando tenga cerrado el curso siguiente, y acompañado de unos excelentes resultados académicos que está claro que es lo que manda".

Asimismo, apunta "cinco puntos clave" para el buen funcionamiento del centro, unos dependientes de los otros: "los resultados académicos, los educativos, la satisfacción de los alumnos, la de las familias y la nuestra como profesores".

Para aclarar esa fórmula de éxito matiza que la diferencia entre los resultados académicos y los educativos radica en que en el primero caso sería obtener el cien por cien de aprobados en selectividad y en las pruebas diagnóstico, mientras que en el los educativos estaría relacionado con el hecho de que los alumnos obtengan el perfil que marca su proyecto educativo.

Enumera algunos de los valores por los que se tiene que caracterizar un educador del centro: compromiso, profesionalidad, trabajo en equipo, cercanía, generar buen ambiente y trascender (en el concepto religioso acorde al carácter del colegio). "Valores que me parecen fundamentales y que aspiramos a que la gente los perciba sin necesidad de nosotros decirlo".

Programas para vivir experiencias.


Esas experiencias y esa manera de aprender a las Serna apela también se desarrollan a través de varias líneas en colaboración con la Consejería de Educación: Red Escuelas Solidarias, Red de Escuelas Promotoras de la Salud, Emprendimiento, Plan de mejora de la competencia matemática, Entusiasmat "sobre matemáticas que está dando un buen resultado relacionado con las inteligencias múltiples, con el que los alumnos, las familias y nosotros estamos muy contentos porque resulta más divertido", o el Plan de mejora de la calidad educativa.

Recapitula y se pasa a la otra mano para contar con los dedos que le quedan el resto de proyectos en los que participan: un Campus de Emprendimiento en Viérnoles, StarInnova para Desarrollo del talento emprendedor, la solicitud del programa LAborEso, para cuarto de Secundaria, a través del cual los alumnos acuden dos semanas a empresas del entorno para conocer y tener su primera visión del mundo laboral, o Erasmus Plus, dirigido a la movilidad del profesorado, que versa sobre inteligencias múltiples entre Irlanda, Turquía, Polonia, Italia, Grecia y Portugal, con el fin de realizar encuentros entre educadores de diferentes países.

"Hacemos una apuesta muy fuerte por experiencias, actividades que vayan más allá de lo puramente académico". Prueba de ello son los programas de inmersión lingüística como el que acaban de hacer en Navarra o el de Recuperación de pueblos abandonados que llevará a varios alumnos del centro, del 5 al 11 de noviembre, a viajar la localidad oscense de Búbal. "Igual no te acuerdas de lo que estudiaste en quinto de primaria, pero lo que no olvidas es la experiencia de aquel verano que el centro te brindó para acudir a los pueblos abandonados".

Valores menesianos.

Preguntado por la importancia de la religión en la educación, el primer director laico en la historia del San José de Reinosa no reniega de estar al frente del único centro religioso de la comarca. "Sé que a muchas personas la asociación educación-religión les echa para atrás, pero el carácter menesiano engloba todos estos valores que he mencionado antes (ser buenas personas, capaces y que contribuyan a mejorar el mundo)".

Por otra parte, y desde la perspectiva de la dirección, lamenta que "hay gente que tiene una visión un poco carca y desfasada de nuestro centro". Se remite a la guardería y anima a los padres a que se acerquen al colegio para preguntar y ver cómo trabajan, que participen en una jornada de puertas abiertas personalizada y extraigan sus propias conclusiones.

"Que la gente cuando entre por la puerta se sienta como en su hogar, como dice el lema menesiano de este año: Bienvenido a casa".