La mejora y filtración del abastecimiento de agua a Hormiguera es una de las demandas más urgentes que el alcalde de Valdeprado del Río, Jaime Soto Marina, plateó al Gobierno regional y, cuyas obras, financiadas por la Consejería de Medio Ambiente con algo más de 58.000 euros, comenzaron hace unas semanas.
La finalidad de este proyecto es eliminar la turbidez del agua. El manantial de Hormiguera, ubicado en la zona conocida como La Tejera, tiene un agua de muy buena calidad, pero co una problemática de turbidez, que ha ido en progresión, provocando que en ocasiones sea inadecuado el suministro, con las consiguientes quejas vecinales.
Para evitar esta situación, los responsables de Medio Ambiente han elaborado un proyecto que ya está siendo adjudicado. Las obras comenzaron con las excavaciones y la colocación de una nueva tubería de polietileno desde el depósito hasta la nueva caseta de filtrado, ubicada a menos desnivel y a unos 100 metros del primero. La caseta tendrá unos tres metros de largo por tres de ancho, con ventana en fachada, doble tabiquería de ladrillo, con aplicación de tratamiento antihumedad asfáltico y suelo de gres o terrazo. Las paredes serán revocadas y pintadas y se instalarán dos puntos de luz y dos tomas de corriente. El tejado, a dos aguas, será de hormigón con onduline bajo la teja árabe. En su interior se colocará el equipo de cloración automático y autónomo, compuesto de bomba dosificadora y la cuba para el almacenamiento del hipoclorito.
Este equipo consta de una bomba de recirculación, la cual al aspirar el agua del manantial la hace pasar por el equipo donde una sonda hace una lectura de la cantidad de cloro libre que tiene el agua y mediante otra bomba dosificadora añade la cantidad necesaria de hipoclorito. Posteriormente esta bomba de recirculación, devuelve el agua con el hipoclorito necesario al depósito, para desde aquí, por su propio peso, llevarlo hasta las viviendas de Hormiguera.
