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Medio Ambiente | Campoo

De Fontibre a Tortosa para acabar con "el negocio del agua"

De Fontibre a Tortosa para acabar con

Colectivos sociales y ecologistas inician este miércoles un marcha desde Reinosa hasta el Nacimiento del Ebro, que finalizará el 21 de abril en la desembocadura del río con el propósito de “resituar el debate del agua en la agenda política”

La Red del Agua Pública de Aragón, Ecologistas en Acción y Coordinadora de Afectados por Grandes Embalses y Trasvases han programado una Marcha por el Ebro que "resitúe el debate del Agua en la agenda política a través de una gran marcha".

Esta marcha recorrerá, entre el 10 y 21 de abril del 2019, distintos escenarios de la Cuenca y de los conflictos hidrológicos que subsisten en ella. Un grupo de ciclistas serán portadores del mensaje de sostenibilidad, cohesión territorial y defensa de lo público.  El miércoles día 10 de abril los participantes serán recibidos a las 15:30 horas en las piscinas municipales cubiertas de Reinosa para dirigirse a continuación en bicicleta hasta Fontibre y presentar públicamente esta acción en el simbólico emplazamiento del nacimiento del Ebro.

En Cantabria, recordaron desde Ecologistas En Acción, tenemos dos trasvases de agua de la cuenca del Ebro a la cuenca del Cantábrico y "la denominación de bitrasvase no deja de alterar el régimen hidrológico de nuestros ríos transformando el ecosistema fluvial y creando falsas expectativas de nuevos negocios relacionados con el agua".

Así, los organizadores esgrimieron varios argumentos para "frenar los planes de un nuevo Trasvase del Ebro" como son: acabar con la compra-venta de derechos de agua mediante "contratos de cesión", derogar los grandes proyectos de construcción de embalses para almacenar el agua para el mercado, defender los ríos de numerosas agresiones y girar hacia lo público la gestión de todo el ciclo del agua son condiciones "imprescindibles" para abordar "un acelerado proceso de cambio climático que amenaza en derivar en procesos de desertización y en graves conflictos entre territorios".

El principio de gestión de nuestra Ley de Aguas de "unidad de cuenca", matizaron, se fundamenta en que el agua en su territorio cumple unas funciones imprescindibles y el ser humano debe adaptarse a esa sostenibilidad.

Acercarse a las "zonas conflictivas" por la gestión del agua

Para dar visibilidad a su reivindicación recorrerán unos 2.500 kilómetros a través de diferentes medios de transporte, incluyendo pequeñas etapas en bicicleta, con el fin de "acercarse a todos los territorios de la cuenca del Ebro donde existen conflictos relacionados con la gestión del agua". Localidades como Reinosa, Garoña-Miranda de Ebro, Haro, Ezcaray, Logroño, Calahorra, Lerin, Tudela, Pedrola, Zaragoza, Chaca, Biscarrués-Murillo de Gállego, Artieda, Tarazona, Morata, Tosos, Santoleya-Aguaviva, Fabara, Flix, Ascó, Benifallet, Xerta y Tortosa acogerán actos y debates "sobre el nuevo peligro que amenaza la Cuenca del Ebro y sus afluentes".

No obstante, apuntaron, no será una marcha masiva de ciclistas, ya que solo contará con un grupo estable de unas quince personas por problemas de infraestructura y logística, a la que se podrán unir participantes del territorio por el que pasen en cada etapa.

Asimismo, la marcha contará con dos actos principales, el domingo 13 de abril, cuando recalará en Zaragoza, con una ‘bicicletada' desde el parque José Antonio Labordeta hasta la plaza del Pilar, y el del cierre en Tortosa el domingo 21 de abril.

Por último, los promotores de esta iniciativa denunciaron que "desde el Gobierno se sigue incentivando el negocio de agua, creando un mercado privado que fomentará el consumo de agua pese a que el Gobierno admitió en noviembre que el Estado español dispondrá en los próximos años de entre un 20% y un 30%" menos de agua".

Todas esas ciudades serán escenario de actos y debates para concienciar sobre la necesidad de acabar con la "pobreza hídrica" y dedicar un porcentaje de la recaudación a proyectos de cooperación. Pero además, concluyeron, para instar a promover reformas legales que acaben con el libre mercado de derechos concesionales y fomenten un uso sostenible del agua como bien común.