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Actualidad | Aguilar de Campoo

"Un día para recordar"

El testimonio de un grupo de trabajadores de Reinosa atrapados en Aguilar de Campoo

Recogemos una carta remitida por un grupo de trabajadores procedentes de Reinosa que se quedaron atrapados en Aguilar de Campoo a causa del temporal:

"Día 4 de febrero, emprendemos nuestro viaje rutinario en bus a las 5 de la mañana desde Reinosa hacia la fábrica Galletas Gullón. Había nieve en la carretera pero poco a poco el autobús iba abriéndose paso hasta Aguilar de Campoo. Llegamos con un poco de retraso pero con normalidad.

A lo largo de la mañana nos iban llegando noticias de que la autovía A-67 se estaba complicando, habiendo una segunda vía, la N-611.

Los trabajadores del turno de tarde llegaron con el autobús, que a continuación nos trasladaría a nuestros hogares, pero cuando nos incorporarnos a la autovía nos encontramos con la Guardia Civil cortando el tráfico porque tenían establecido un punto negro en ambas carreteras.

Volvemos hacia Aguilar para comer. En la estación de autobuses nos íbamos encontrando con todos los compañeros de trabajo de la zona de Cantabria. Había nervios, tensión e incertidumbre, y todo entre muchas risas.

A medida que avanzaba la tarde las cosas se complicaban más, no paraba de nevar. Los conductores de Autocares Donato nos informaron que no podíamos volver a casa, por lo que buscaron una segunda vía, acercarnos a la estación de tren. Algunos optamos por quedarnos en Aguilar a dormir en casa de compañeros que no dudaron en ayudarnos por nuestra situación, ya que la mayoría ni si quiera teníamos dinero y los hoteles estaban completos. Otros decidieron ir al tren previsto para las 19 horas, que finalmente salió en dirección a Reinosa a las 21.30 y así pudieron llegar a casa.

Eran las 10 de la noche y nuestros compañeros del otro turno salían de trabajar sin opción de hotel ni de tren y mucho menos de poder volver en el autobús que les había llevado a trabajar. Para entonces la compañía de autobuses ya había contactado con la alcaldesa de Aguilar de Campoo, María José Ortega, para buscar soluciones.

El Ayuntamiento habilitó el colegio San Gregorio para los trabajadores que no podía volver a sus casas una vez finalizada su jornada, y muchas personas se volcaron para prestar colchones, esterillas, mantas y compañía.

Al día siguiente, viendo que el panorama seguía igual, todos los que nos habíamos quedado en Aguilar esa noche, nos acercamos a la estación de tren de la villa para coger un Alvia, que no tenía parada ni en Aguilar ni en Reinosa, pero que dadas las circunstancias decidieron que la realizase. ¡Por fin llegamos a casa!

Con estas líneas queremos agradecer a todos los integrantes de Autocares Donato por el interés mostrado hacia todos nosotros y no dejarnos ni un segundo ‘tirados' ante la nieve".