Mediante un comunicado de prensa remitido a Vive Campoo, la sección sindical de CSIF en la planta de Cuétara en Reinosa, la misma que el pasado 10 de noviembre firmaba con la dirección de la empresa un convenio colectivo de eficacia limitida ('extraestatutario') tras no ver ratificadas sus propupuestas en dos asambleas de trabajadores y tras el intento fallido de acercar posturas en el Orecla, ha anunciado que el 80% de la plantilla habría ya firmado el convenio de eficacia limitada, que ante este respaldo por otro lado lógico y esperado -de no firmar los trabajadores a título personal se quedarían fuera de los incrementos salariales logrados-, se convertirá en convenio colectivo estatutario.
Según explica la sección sindical de CSIF en Galletas Cuétara, "tras unas dilatadas negociaciones que abarcaban ya más de veinte meses y, habiéndose llegado a una situación de claro sinsentido, respetando el sentir manifestado por los afiliados y simpatizantes de CSIF, se decide firmar un convenio de eficacia limitada. Dicho acuerdo, a fecha actual, ya ha sido libremente aceptado y suscrito por más del 80% de los trabajadores en plantilla". Afirmar que la rúbrica de dicho acuerdo se ha realizado "espaldas de los trabajadores" como hace UGT, no es otra cosa que el "recurso del pataleo de quien ha bloqueado las negociaciones (incluso abandonando las mesas de negociación en reiteradas ocasiones) y comprueba, ahora, el inmensamente mayoritario apoyo de los trabajadores". "Precisamente ha sido la pasividad y el inmovilismo puesto de manifiesto, tanto por UGT, como por USO, los que han provocado que CSIF y el resto de representantes de los trabajadores que apostaron por seguir negociando, realizasen propuestas alternativas que han hecho posible la consecución de dicho acuerdo", manifiestan desde CSIF.
Según prosigue el comunicado, "obviamente, no hace falta aclarar que, no fue solamente por la mejora que se consigue de las condiciones de los trabajadores, si no que, además, siguiendo la premisa encomendada por afiliados y votantes de CSIF, al conseguir compromisos por parte de la empresa, como el importantísimo acuerdo de fomento de empleo, se decidió aceptar el acuerdo. Entre otras importantes cuestiones, dicho fomento de empleo se traducirá en la contratación, fija e indefinida, de 20 compañeros, lo cual supone un 20% de incremento de plantilla".
CSIF concluye el comunicado felicitándose "por haber propiciado un acuerdo que valora de manera muy positiva, con una aceptación generalizada entre la plantilla de trabajadores de Galletas Cuétara, lo que viene a demostrar que, otras formaciones sindicales, se encuentran en las antípodas de la realidad de dicha plantilla".
"Por la puerta de atrás"
Sobre estas cuestiones ya se manifestó la pasada semana UGT. Según precisó el responsable regional de Alimentación, Bebidas y Tabacos de la federación de Industria de UGT, Valentín Fernández, "no es de recibo que, tras dos preacuerdos no ratificados por la mayoría de los trabajadores, se firme un convenio colectivo por la puerta de atrás, rompiendo la escasa unidad de acción sindical que hubo durante el desarrollo de la negociación".
"Somos conscientes de la tesitura en la que se ha colocado ahora a los trabajadores y creemos que deben ser libres a título personal para adherirse o no voluntariamente al convenio colectivo si lo consideran oportuno", subrayó entonces Fernández, quien reiteró que UGT no lo rubricará.
De todos modos, el sindicalista mostró su preocupación porque lo ocurrido con el convenio colectivo de eficacia limitada suscrito por CSIF y la dirección de Cuétara "siente precedentes y en el futuro se pueda imponer esta tendencia de alcanzar acuerdos sin tener en cuenta a la mayoría de la plantilla, devaluándose así la labor de los sindicatos y los legítimos representantes legales de los trabajadores".
