El Belén de la Iglesia de los Carmelitas Descalzos de Reinosa ya se encuentra abierto al público para recibir visitas durante esta Navidad. Más de doscientas figuras, casas hechas a mano, detalles que pasan desapercibidos, una banda sonora de villancicos, el estruendo de un trueno premonitorio y una estrella que guía el camino. En definitiva, una verdadera obra de ingeniería para conducir el agua y un laberinto de cables para iluminar un espacio de unos 35 metros cuadrados donde se refleja la vida tradicional cántabra junto a las escenas bíblicas.